El concejal de Izquierda Unida-Podemos en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, denuncia la ausencia de cláusulas que obliguen a la empresa adjudicataria del contrato de depuración de aguas residuales de la ciudad a elaborar y ejecutar un plan de educación o concienciación ambiental. Una necesaria medida que promovería "un proceso de sensibilización para no generar residuos urbanos que plantean luego problemas en las redes de saneamiento, como ocurre con las toallita", como explica Fernández.
En este sentido, el concejal de Izquierda Unida señala que las declaraciones del Gobierno local, en las que se compromete a trabajar para no generar más residuos perjudiciales para el río Tajo y para mejorar las infraestructuras de depuración, deberían venir acompañadas por la exigencia de campañas de sensibilización en los pliegos que rigen la contratación de la gestión de la depuración de agua en Toledo. "Sin embargo, de los 100 puntos máximos que se asignarán a las empresas que opten a gestionar este servicio público no hay ninguno para garantizar estas campañas", recrimina el portavoz de IU.
Esta carencia, vaticina el edil de Izquierda Unida, derivará en que las medidas de concienciación las financie el Ayuntamiento de Toledo directamente, "para lo que la Concejalía del Tajo no tiene presupuesto asignado para 2024", u obliguen a gastos extra en "nuevas firmas de contratos con otras empresas, o incluso con la misma de la adjudicación, que hagan esas labores de sensibilización".
En este sentido, Txema Fernández critica que, si en los pliegos de condiciones técnicos y administrativos, el Ayuntamiento no obliga a ejecutar los contratos con determinadas cláusulas, "nunca podremos obligar a la empresa adjudicataria a su prestación o tendremos que contratar ese servicio a otra empresa, reprivatizando la prestación inicial, o a la misma, a modo de compensación de las bajas económicas que se hacen para ser los adjudicatarios del contrato".
Convocatoria. Este será uno de los aspectos que se analizarán en el acto público organizado por Izquierda Unida y que tendrá lugar el miércoles en el Centro Social del Polígono a partir de las 18.30 horas. Un acto al que invitan a todos los vecinos y vecinas de Toledo para conocer los detalles de un contrato para los próximos 10 años, el de depuración de las aguas residuales, que costará a los toledanos cerca de 55 millones de euros y cuya adjudicación se realizará, "como en la generalidad de los contratos del Ayuntamiento, a la empresa que más puntos saque de los 100 posibles".
Al respecto, reprocha Txema Fernández, que "como ocurre con otros contratos, no se ha presentado ningún análisis del estado de cumplimiento del anterior, ni ninguna evaluación de qué debería abordar el nuevo para garantizar la prestación óptima del servicio". "No se ha hecho ningún diagnóstico tampoco que nos indique qué necesidades no se han cubierto con el anterior contrato y qué debemos cubrir con el nuevo en los próximos 10 años", añade el edil de Izquierda Unida.