Absuelto el guardia civil acusado de revelación de secretos

J.Moreno
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La sentencia detalla que el acceso a los ficheros no es delito y que las consultas al sistema SIGO no causaron perjuicio a la pareja de la exposa del supuesto inductor

Absuelto el guardia civil acusado de revelación de secretos - Foto: Yolanda Lancha

La Audiencia Provincial de Toledo absolvió en una sentencia firmada el 13 de noviembre de 2024 a un guardia civil por un delito de descubrimiento y revelación de secretos por funcionario público. La Fiscalía sostenía la acusación en que el agente destinado en Ocaña hizo 13 consultas en 2019 en las bases de datos del sistema Sigo de la Benemérita acerca de datos de la pareja de la exposa del segundo procesado.

«Se ha demostrado que pudo obtener datos sobre la matrícula y modelo del vehículo, sin que se haya acreditado que pudiera acceder a otro tipo de datos o de archivos para obterner cualquier otro dato», indica la setencia, que excluye al otro acusado de la participación en la petición de esta consulta, por lo que quedó también absuelto de inducción.

«No consta acreditado que las referidas consultas realizadas en las bases de datos del sistema SIGO de la Guardia Civil causaran perjuicio alguno a la persona cuyos datos personales fueron consultados», subraya la sentencia en los hechos probados tras la vista oral celebrada el 30 de octubre de 2024.

El guardia civil y el otro procesado coincidieron ese día en el banquillo de los acusados de la Audiencia Provincial. Ambos afirmaron no conocerse, sólo de vista, aunque figuraban en la acusación definitiva de la Fiscalía como presunto autor e inductor de un delito de descubrimiento y revelación de secretos.

Juan Carlos, guardia civil destinado en 2019 en la agrupación de tráfico de Ocaña, se enfrentaba a la petición definitiva de la Fiscalía de tres años de prisión y a la pérdida de la condición de agente, por la presunta comisión de ese delito de descubrimiento y revelación de secretos.

El procesado, según la acusación del ministerio público, consultó la base de datos de la Benemérita para informar al procesado sobre la nueva pareja de su exesposa. La versión del agente de la Guardia Civil fue muy contraria. El procesado afirmó que no conocía siquiera al exmarido de la denunciante, aunque sí al padre. Con ese vínculo, el padre de Roberto pidió al guardia civil, con más de 30 años de ejercicio en el cuerpo sin una mancha, que temía que el novio de su exnuera tuviera vínculos terroristas y el peligro derivado para sus tres nietos.

El agente reconoció que consultó los datos por curiosidad por el estado de agitación de Antonio, pero aseguró que no compartió con nadie el contenido.

«De la prueba practicada, se colige con meridiana claridad que no podemos saber a qué concretos datos accedió el acusado, y ello es absolutamente esencial para absolver, ya que la jurisprudencia ha declarado que el acceso a los ficheros no es delito, sino que únicamente y en determinadas circunstancias, el acceso a los datos», señaló en función de la pericial de la propia Guardia Civil.