El Ayuntamiento de Pampliega (Burgos) organiza este sábado un funeral visigodo en recuerdo del rey Wamba (646-688) con motivo del 750 aniversario de la salida de sus restos, enterrados en el monasterio de San Vicente, con destino a Toledo por orden del rey Alfonso X El Sabio, y cuya vuelta a la localidad llevan años reclamando.
El funeral visigodo correrá a cargo de Neonymus, el proyecto musical del artista Silberius de Ura, e incluirá el encendido de 750 velas en recuerdo al rey que eligió Pampliega como refugio y lugar de descanso, ha explicado a EFE el teniente de alcalde del municipio, Pedro Miguel Antón, quien ha admitido que para ellos este aniversario es "triste".
El 13 de abril de 1274 los restos de Wamba salieron de su tumba, una sepultura en suelo discreta y modesta a la entrada de la ermita, para ser trasladados a la desaparecida Santa Leocadia del Alcázar, en Toledo, bajo la justificación de que ya no existía ni iglesia ni monasterio de San Vicente, pues la invasión sarracena del 711 los había incendiado.
Allí estuvieron, junto con los del rey Recesvinto, hasta que en 1845, y después de que ambas tumbas fueran expoliadas por los franceses en 1808, se trasladasen a la Catedral de Toledo, por orden de la Comisión de Monumentos Artísticos e Históricos de Toledo presidida por la reina Isabel II, donde se custodian actualmente en la capilla mozárabe.
Coincidiendo con este 750 aniversario, Pampliega ha organizado un homenaje "sencillo y humilde", con el que quieren reivindicar la devolución de los restos del rey godo, pues su deseo era descansar en la localidad, a donde llegó en el año 680, desterrado de Toledo, capital del reino visigodo, y tras haber sido envenenado.
La jornada de homenaje arrancará a las 13:00 con una misa en honor a Wamba, presidida por el arzobispo emérito de Burgos Fidel Herráez, a la que seguirá un mercado en la plaza Mayor y actividades infantiles; el plato fuerte será, a las 20:30, el funeral visigodo y el encendido de velas, para terminar con una fiesta godo con un DJ a las 23:30.
Una reclamación desde el diálogo. Pedro Miguel Antón ha insistido en que la reclamación del Ayuntamiento se hace desde el diálogo, buscando un hermanamiento más que un enfrentamiento, y sin contemplar en ningún momento judicializar el caso, como "erróneamente" se ha informado recientemente tras la petición en Toledo de organizar un funeral de Estado para Wamba y Recesvinto.
El Consistorio, a través del Arzobispado de Burgos, ha iniciado contactos con el Arzobispado de Toledo, porque creen que una de las vías a seguir es la eclesiástica, si bien la propia Catedral ha insistido en que son meros depositarios de los restos, puesto que fue la Casa Real la que, en 1845, decidió trasladarlos al templo.
El teniente de alcalde ha reconocido que "nadie da el paso" ni asume la competencia para tomar la decisión de autorizar o no el regreso de los restos a Pampliega, pero el municipio considera que tiene una deuda histórica con Wamba, que pidió ser enterrado con humildad en el lugar que le acogió en su destierro.
Pampliega, clave en la historia visigoda. Antón ha recordado que Pampliega juega un papel destacado en la historia del reino visigodo pues no solo Wamba es uno de sus reyes más destacados sino que la iglesia de San Vicente fue fundada por Recaredo y Chindasvinto se proclamó rey en la localidad burgalesa; además, Recesvinto fue a la fuente de la Legaña buscando curación a sus males de riñón, aunque finalmente la encontró en Baños de Cerrato (Palencia), donde erigió la basílica de San Juan de Baños.
De aquella historia, Pampliega conserva un monolito en el lugar en el que se levantó el monasterio de San Vicente y estuvo enterrado su rey godo, así como un busto en la plaza Mayor y otro en la entrada al municipio. Además, cada vez son más los turistas que llegan preguntando por Wamba, lo que anima a los vecinos a continuar con su reivindicación.