En cada rincón de Toledo, en las empedradas callejuelas que serpentean la ciudad, entre los abrazos de su muralla histórica, resuena una melodía. Un sonido, el eco apasionado de 'La tierra del Lince', una revolución sonora que se propaga desde «Pozo Amargo a la Catedral».

Amatria conquista la ciudad de las tres culturas con su última canción. Notas en el Casco con un hechizo musical inolvidable.

Queremos conocer un poco más a la persona… ¿Por qué Amatria?

Entrevista a Joni Antequera, grupo Amatria. - Foto: Yolanda Lancha

El nombre es mi segundo apellido. Mi abuelo, que se llamaba Julio Amatria, por parte de madre, siempre decía que se iba a perder el apellido. Y entonces, justo cuando él falleció, nos dejó un dinero a los nietos y yo me pude comprar mi primer equipo de voces. En ese momento yo tenía bandas, el proyecto personal no existía, y cuando saqué mis canciones, esas que no cabían en las bandas, digo: 'bueno, tengo que ponerle nombre a todo esto'. Justo fue en aquella época, cuando pasó todo, y en honor a mi abuelo, decidí poner mi segundo apellido. Que no se pierda. Y me puse Amatria.

Se puede decir que tu abuelo tiene algo de culpa que estés triunfando…

Y es gracias también a mis hermanos. Por la influencia de mis hermanos mayores que escuchaban mucha música, muchos discos y siempre me estaban como educando. Me regalaban un disco que me gustase de pequeño y otro que me gustara de mayor o que me educara de alguna manera.

Entrevista a Joni Antequera, grupo Amatria. - Foto: Yolanda Lancha

Luego, además, ver a mi hermano mayor como se iba al ensayo. Para mí era como algo mágico. Me saca 16 años, y le veía con su chupa de cuero irse al ensayo, y a mí, aquello me parecía increíble. '¿Qué lugar mágico es ese?, el ensayo', me preguntaba.

Con todo eso, con la influencia de mi hermano Pablo y mi hermano Óscar, me ha hecho dedicarme algo creativo como la música.

Tendrán ahora algo de envidia sana...

Ellos lo viven de alguna forma a través de mí. Si (entre risas).

Compositor, músico, y productor musical. ¿Qué tienes entre manos ahora?

Ahora estoy centrado en la presentación del disco ('De las Cenizas'), que tan solo tiene dos meses. Y estoy a tope con la promoción, los shows en directo...

Entonces, ¿dónde te podremos ver disfrutar en directo?

Ahora mismo tenemos cerradas cinco fechas, de momento. Hay algunas más que todavía no han salido, pero poco a poco vamos cerrando fechas.

El viernes 23 en febrero, en Madrid, en el Teatro Barceló. El sábado 13 de abril en Toledo, en el Círculo del Arte, o el Fortaleza Sound 2024, en Lorca, del 28 al 30 de junio. (Junto a artistas como Vetusta Morla, ELYELLA, Karavana, Amatria, The Levitants, Pipiolas, Kuve, y Lady Ma Belle)

Fechas en salas y festivales este año, ¿qué es lo que más te gusta?

Cada cosa tiene su punto. Los festivales están muy bien porque son un escaparate. Hay gente que no va a verte a ti, que puede conocerte, y luego tiene la parte mala, que la gente no va a verte a ti. Hay mucha gente que sí, pero hay otra que no.

Tienes que tener muy en cuenta la actuación que vas a hacer. Yo en los festivales voy a la yugular, porque hay gente que está por el fondo que no viene a verte y quiero engancharlos. Sin embargo, en una sala tú vas a disfrutar muchísimo. La gente se sabe las canciones, puedes hacer tu show un poco más largo, puedes cantar canciones que vayan a tempos más lentos, o sea, puedes profundizar más.

Elegir es muy difícil, yo prefiero tener un equilibrio. Yo en invierno suelo hacer salas y en primavera/verano los festivales, eso es lo ideal.

Con esta mezcla, ¿cómo podemos definir a Amatria?

Siempre estoy orientado a la diversión. Soy divertido. Al final es un proyecto personal, entonces se refleja lo que eres. A mí me gusta el cachondeo. Tú cuando vas a un directo te los vas a pasar bien. Eso sí, hay mucha profundidad. Si escuchas el disco, escuchas las letras, a las que le doy mucha importancia, hay mensaje y cosas que quiero contar. Pero lo visto de una forma hedonista. Al producir las canciones de una forma más de baile parece que todo es fiesta. Hay algo de dolor, pero está revestido de diversión.    

Si vienes a un concierto lo que vamos a hacer es divertirnos juntos. Estoy hablando de esto, pero vamos a bailarlo.  

Vamos a reírnos de las penas...

Es un poco eso. Al final las penas son un poco el motor de las canciones. Contar lo malo que te pasa porque lo bueno ya lo disfrutas.  

En tu último álbum, 'De las Cenizas', podemos encontrar 'La tierra del Lince', la canción que ha revolucionado Toledo...

Yo tengo dos hijos que han nacido aquí. 'La tierra del Lince' habla de la sensación de no ser de un sitio y serlo. Yo ya soy de Toledo para toda la vida. Porque mis hijos, que son parte de mí, son de aquí.
Es una sensación muy rara. Mis hijos son toledanos, han nacido aquí, por lo tanto, yo también lo soy, de alguna forma, y es lo que cuento en la canción. 'Fui a lo alto del monte a echar mis raíces. Fui a lo alto del monte a echar mis raíces. Para sentarme a su lado y verlas crecer', vivo en el Casco y hace referencia a eso, subo las cuestas de Toledo para verlas crecer.

Es una canción que hago a mis hijos y la sensación de echar raíces en un sitio. Además, es Toledo, la ciudad más bonita que he visto. Y todo el recorrido que hago 'de la Cornisa', 'de Pozo Amargo a la Catedral' es un recorrido que hago cada día con ellos del cole, de la guardería...

Además, la melodía surgió por un pódcast que estaba escuchando cuando caminaba por la Cornisa. Es una canción más toledana que mis hijas. Surge aquí por todo lo que me rodea, no existiría sino existiera Toledo.

Es una canción muy íntima y me 'flipa' como la gente la hace suya. Si te engancha ya es para ti.

Canción que pone ritmo al video promocional de Toledo en Fitur 2024...

Llegó a oídas del Ayuntamiento, y a partir de ahí se creó una bola. Nos llamaron y la eligieron como favorita.

Nunca sabes donde puede llegar. Alguien escuchando la canción en la radio en el coche.