No es un asunto nuevo para la ciudad, pero es recurrente entre la preocupación vecinal. Así se lo han hecho saber desde el barrio de Santa Bárbara al Ayuntamiento de Toledo, preocupados por la ausencia de iluminación en la rotonda que da acceso al barrio desde la TO-23, la vía que une Santa Bárbara con el Polígono. La protesta vecinal se produjo en el último Consejo de Participación Ciudadana del barrio, cuando algunos de los vecinos comunicaron su preocupación por una situación que se da diariamente al no dar suficiente luz las farolas existentes en la zona.

La primera respuesta por parte del los representantes municipales fue clara y concisa, al responder José  Vicente García-Toledano, edil de Festejos y presidente del distrito, que deben elevar la queja a la delegada del Gobierno, Milagros Tolón, por tratarse ella de quien posee las competencias al respecto.

Sin embargo, fue Ignacio Jiménez, concejal de Movilidad, el que aportó más información a la demanda vecinal, ya que reiteró que  la titularidad de esta TO-23 y, por tanto, de la iluminación es competencia del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Pese a esa respuesta, Jiménez informó de que ha sido el Ayuntamiento de Toledo el que ha venido  reparando históricamente estas bombillas desde hace años, incluso sin tener competencias para ello, pero que esta última avería que ha dejado sin luz a los accesos al barrio de Santa Bárbara se corresponde con un robo de cableado en las farolas existentes en el entorno.

Al hilo de esta respuesta, Ignacio Jiménez añadió que «no lo vamos a arreglar nosotros», devolviendo de nuevo la pelota al tejado de la Delegación de Gobierno. 

Como consecuencia de esta postura adquirida por el Gobierno local, los vecinos reclamaron que se sancionen a los responsables del citado robo de cableado, obteniendo de nuevo como respuesta de parte de Ignacio Jiménez que «para eso se instalará la Zona de Bajas Emisiones, entre otras funciones», para que las cámaras que traerá este sistema localicen a los responsables y se puedan determinar las sanciones correspondientes.

Hasta entonces, el entorno de la TO-23 en sus inmediaciones a la rotonda de Santa Bárbara seguirá contando con un grado inferior al adecuado en cuanto a iluminación se refiere. En su día, cuando se presentó el proyecto del tercer carril para esta TO-23 se mencionó la posibilidad de que se renovara la iluminación, no sólo de este tramo, sino de toda la vía hasta el Polígono, con la condición de que el Ayuntamiento asumiera su coste. Ahora, con un cambio de color en el Gobierno municipal, habrá que ver si sigue o no vigente este acuerdo entre administraciones.