El Plan Especial del Casco Histórico (PECHT) necesita retoques para actualizarlo y cumplir con las necesidades de la ciudad. El objetivo pasa por actualizar una normativa que data del año 1997 y ampliar su radio de acción con medidas encaminadas que tengan como objetivo «poner en valor el Casco».
En principio, el concejal de Planeamiento, Florentino Delgado, dejó caer esta mañana la necesidad de que el PECHT incluya la obligación de que los propietarios mantengan sus inmuebles en buen estado de conservación.
La idea tampoco es nueva porque desde hace años hay normativa que incide en esta obligación, pero el concejal explicó que se trata de avanzar y que se garantice obras de conservación y rehabilitación en el Casco, de tal manera que si el propietario no puede encargarse de cumplir con la normativa, el Ayuntamiento pueda emprender la iniciativa rehabilitadora a cambio de compensar al propietario con dinero o bienes y «poner las viviendas en el mercado».
Delgado insistió en que el PECHT daría forma a toda esa normativa que al final se encuentra «diluida», de manera que «se requeriría a los propietarios para que mantengan sus viviendas en condiciones». Una vez cumplido el plazo, el concejal tiene claro que se podría optar por dos vías, que la administración intervenga e incluso se plantee la posibilidad de la expropiación o plantear una actividad rehabilitadora en la que el propietario sí podría optar a una compensación y el inmueble quedaría listo para incluirlo en el mercado. En este caso, el ejemplo lo está liderando el Consorcio con su programa de rehabilitación de edificios en desuso.