'La Caridad no cierra', ese es el lema del Centro de Distribución 'Virgen del Sagrario' de Cáritas Diocesana de Toledo, uno de los centros que más ha crecido su actividad desde el año 2020. En este centro se canalizan todas las donaciones en especie que llegan y desde donde se preparan los lotes que posteriormente, por un sistema de cita previa, se distribuyen a 80 Cáritas Parroquiales al mes, centros de personas sin hogar, comedores sociales, 'Hogar 2000' y otros centros diocesanos de los distintos puntos de la Archidiócesis, así como residencias, conventos y seminarios diocesanos.
Este Centro de Distribución funciona gracias a la labor de tres voluntarios, coordinados por Marisa Martínez, también voluntaria, que reciben las donaciones de las empresas con corazón, recogen las donaciones de las diferentes campañas que se celebran en Toledo y lo distribuyen.
En 2023 se repartieron más de 700.00 unidades de productos, a los que hay que sumar más de 45.600 de diferentes celebraciones. Todos los productos (fundamentalmente alimenticios y de higiene personal) están valorados en más de 1 millón de euros.
La secretaria general de Cáritas Diocesana de Toledo, Mónica Moreno, pone de manifiesto «el enorme trabajo que se realiza desde este Centro que, sin duda alguna, es el punto de encuentro de muchos voluntarios que cada día que vienen a recoger los pedidos que se les prepara para las Cáritas Parroquiales», y agradece «el compromiso de las empresas con corazón que nos ayudan en nuestras necesidades, cada vez más grandes, no solo dando productos de primera necesidad e higiene personal sino también otros como carne, fiambres, huevos, dulces , frutos secos , zumos y refrescos, material escolar y menaje del hogar».
Marisa Martínez indica que gracias a la labor que se realiza la red de economatos de Cáritas «puede mantenerse y nutrirse». En este año 2023 - señala la coordinadora- «estuvimos muy pendientes de los pueblos afectados por la DANA, facilitando a las familias todo lo que necesitaban, y así como a Cuba, Siria y Benín».
En 2023, gracias a las donaciones que se recibieron y a los fondos propios de Cáritas Diocesana de Toledo, se repartieron 12.000 litros de leche, 1.600 litros de aceite; 157.000 unidades de alimentos no perecederos ; 1.500 docenas de huevos; 29.000 de carne y fiambres, 478.000 unidades de lácteos, 32.779 unidades de productos de higiene, 900 productos para bebes ( pañales, leche infantil papillas) entre otros.
El año 2023 ha sido un año complicado y difícil para las familias que atiende Cáritas, motivado por la subida de los precios, las olas migratorias y también la escasez de vivienda, teniendo mayor número de personas en los distintos programas de la entidad. Por este motivo Marisa Martínez hace un llamamiento a la donación de particulares y empresas, pues en estos momentos «necesitamos leche, aceite legumbres, cacao y conservas» y anima a las empresas «a realizar un donativo para que podamos comprar los productos que necesitamos en ese momento según la demanda».