Desconoce el informe de la OCU sobre la falta de medicamentos, pero Colegio Oficial de Farmacéuticos de Toledo agradece a esta entidad y al Colegio de Médicos Toledo que también hagan pública esta situación que lleva denunciando desde hace tiempo. Las tres partes vienen a coincidir en el diagnóstico del problema y apuntan hacia soluciones similares.

El Colegio de Médicos ha suscrito los términos de un informe elaborado por la OCU y apunta su preocupación ante el desabastecimiento en Castilla-La Mancha, fruto de una situación estatal, explica su secretario, Raúl Calvo, que se puede apreciar en la página de la Agencia Española del Medicamento. En realidad, no es nada nuevo, apunta el presidente del Colegio de Farmacéuticos, Francisco Javier Jimeno, porque «el desabastecimiento de medicamentos es algo que nosotros ponemos en conocimiento y hablamos de ello siempre, es un mal endémico que sufrimos y se acrecienta más en determinadas épocas del año y en determinados productos, sobre todo».

Destaca en estos momentos Jimeno la falta de determinadas insulinas, como el Ozempic, que se usa para adelgazar y se está desviando a otros usos «y los pacientes diabéticos que realmente lo necesitan y no tienen otra alternativa sufren su desabastecimiento». El desabastecimiento en general se suele dar más, fundamentalmente, a final de año por «causas multisectoriales». Calvo apunta además que hay problemas con fármacos especializados, pero también otros básicos, como la amoxicilina y otros antibióticos, incluso, aspirinas y antiinflamatorios.

Soluciones. Ante esta circunstancia, apunta Jimeno, en estos momentos «el 99 por ciento de los abastecimientos que se producen los soluciona el propio farmacéutico». Busca una medicina alternativa y le comunica al médico que puede recetarla. Además, el Consejo Autonómico de Colegios de Farmacéutico de la región informa periódicamente al Sescam de esta falta de suministros de determinados medicamentos, para que se lo comunique a los médicos.

Los colegios de Farmacéuticos y Médicos, así como la OCU, coinciden en que la solución puede llegar en un cambio de la Ley General del Medicamento, que permita sustituir entre formas farmacéuticas. Hoy no se puede sustituir en farmacia un paracetamol efervescente por uno en comprimido sin una nueva receta médica. La idea es facilitarlo, siempre que los principios activos y dosis sean iguales.