Isabel regenta con su marido desde hace más de tres décadas la joyería Muñoz de Tembleque. Desde entonces, ningún hecho delictivo había perturbado el funcionamiento del único negocio del sector en este municipio de La Mancha toledana que roza los 2.000 empadronados. Pero el pasado jueves, la dueña salió a la calle con la cara ensangrentada. Dos atracadores, un hombre y una mujer, habían robado hacia las 10:45 joyas y dinero mientras agredían a la propietaria. La Guardia Civil investiga desde entonces la comisión de este hecho delictivo.

El suceso ha conmocionado a esta población pegada a la autovía A-4 y también paso de carreteras que comunican la comarca. «Es un punto estratégico», ensalza un vecino. Sin embargo, ninguna cámara de vigilancia monitoriza las entradas al pueblo, al contrario que municipios aledaños como Villacañas o Villanueva de Bogas. Todo su círculo dispone de un sistema de control de imagen, menos Tembleque.

Por eso, los vecinos instan al Ayuntamiento la instalación de esas cámaras de vigilancia tras el atraco a la joyería del pueblo, una tienda pequeña localizada en la calle del Convento que, cerrada, no evidencia actividad comercial alguna. No hoy rótulos. Ni presencia en internet. Hace unos 20 años, el matrimonio se instalaba también durante las fiestas patronales en un local de la misma plaza Mayor, un extraordinario ejemplo barroco provincial originario del siglo XVII y declarado Bien de Interés Cultural, para sacar adelante el negocio familiar.

El Ayuntamiento de Tembleque planea desde hace meses la instalación de las cámaras de vigilancia, pero está a la espera de la consecución de ayudas europeas. Al menos así lo explicó el alcalde, Jesús Fernández, en la sesión plenaria celebrada en octubre de 2023.

El equipo de Gobierno manchego había pedido ya entonces presupuestos e intentaba atar subvenciones como las del programa europeo Leader.

Mientras, sucede un goteo de robos en Tembleque, como en tantísimas poblaciones de la provincia. Pero el violento atraco del pasado jueves ha sacudido a los vecinos que reclaman esas cámaras de vigilancia.