La moción presentada por Vox en defensa de la mujer y contra cualquier tipo de violencia, tal era su encabezado, fue rechazada con los votos en contra de los grupos municipales de la izquierda y las abstenciones de los ediles del PP. Inés Cañizares reclamó una «respuesta coordinada» para hacer frente al «repunte» que se ha constatado en los últimos días. En la exposición de motivos, la vicealcaldesa criticó los efectos de la ley del solo sí es sí y señaló a «aquellas culturas que utilizan a la mujer como instrumento» como parte del auge del problema.
El PP no apoyó la resolución presentada por su socio en el Gobierno municipal. «Estamos a favor de los conceptos que se citan, pero echamos de menos algunos otros», aseguró Marisol Illescas, responsable de Asuntos Sociales. En cualquier caso, la bancada popular celebró tanto un texto con «un fondo de defensa de la mujer» como la asistencia de los ediles de Vox a los actos previos al 25N, incluyendo la colocación del lazo blanco sobre fondo morado en la fachada consistorial.
La docena de concejales socialistas votó en contra de la moción; además, el grupo municipal más numeroso según el número de ediles decidió no participar en este debate, un hecho que Cañizares afeó por «no ser muy democrático».
Por su parte, Txema Fernández, concejal de IU-Podemos lamentó la narrativa «xenófoba» de la propuesta. Cañizares insistió en aquellos «ciudadanos que no han sido educados en nuestros valores».