Los datos de criminalidad correspondientes al primer trimestre del año arrojan un importante crecimiento de los robos en cualquiera de sus tipos en la provincia de Toledo. Entre enero y marzo de 2024, los diferentes cuerpos policiales que operan en el territorio han constatado 680 robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones, lo que supone un alza del 14,3% respecto al mismo periodo del año anterior y más de un centenar de asaltos a ciudadanos con amenaza, un 71% más. También se incrementan las sustracciones de vehículos y los hurtos, otras dos formas atentatorias contra el patrimonio.

De todos los robos con fuerza cometidos en diferentes inmuebles de la provincia, dos de cada tres, aproximadamente, se perpetraron contra domicilios. Un total de 449 viviendas, un 7,2% más que en el primer trimestre del pasado año, sufrieron el ataque de los ladrones.

El repunte más pronunciado en las categorías relacionadas con los robos se produce en aquella en la que median violencia e intimidación y atenta contra las personas. Se han producido 106 robos de esta forma en la provincia en los tres primeros meses del año, frente a los 62 que se contabilizaron en el inicio de 2023. El aumento, del 71%, describe un incremento de la inseguridad ciudadana. Además, se disparan los robos de vehículos, de 64 a 98 unidades en el primer trimestre del año.

Más allá de los robos, el volumen de la criminalidad se eleva un 5,8% hasta marzo respecto al volumen del mismo periodo de 2023. El Ministerio del Interior estima en 8.338 las infracciones penales cometidas en el primer trimestre, frente a las 7.884 del ejercicio pretérito. La subida recorre buena parte de los indicadores delictivos, aunque se reduce en los referidos a los ataques contra la libertad sexual y los homicidios.

En el ámbito de la intimidad, caen tanto las violaciones como el resto de delitos relacionados con este apartado -acoso, exhibicionismo, explotación o corrupción de menores, entre otros-. Entre enero y marzo, se han registrado siete agresiones con penetración, por las diez de los tres primeros meses del año anterior; mientras que el resto de delitos contra la libertad sexual también han menguado: desde los 51 hasta los 47 de la última revisión estadística. 

A lo largo del pasado año, se observaron medio centenar de agresiones con acceso carnal en el territorio toledano, el dato más elevado de la serie histórica. La proyección que señala el primer dato parcial del año en curso apunta a una reducción de los casos en el acumulado de 2024 que deberá confirmarse en los próximos meses.

Asimismo, no se ha lamentado ninguna muerte por homicidio en la provincia; en el primer trimestre de 2023, sin embargo, hubo una. Tampoco se ha producido ningún secuestro; hasta marzo del año anterior se observó uno.

Por otra parte, se mantienen tanto el volumen de homicidios en grado de tentativa (un caso en ambos periodos) como el peso de la cibercriminalidad. En el inicio de 2023 se produjeron 1.692 infracciones penales relacionadas con los entornos virtuales, por las 1.685 de los tres primeros meses del año. Tanto el número de delitos online como la proporción sobre el conjunto de las infracciones han tendido a crecer en los últimos años.

Los casos delictivos relacionados con el tráfico de drogas mantienen, con 75 crímenes, el dato del año anterior. Los daños por lesiones en peleas se incrementan un 34,5% entre los dos periodos que se comparan, hasta los 113 delitos.

DATOS POR CIUDADES. La criminalidad repuntó con fuerza en las ciudades de Talavera y Toledo, las dos más pobladas de la provincia, y minoró en Illescas y Seseña, ambas en la comarca septentrional de la Sagra. En la ciudad de la cerámica se constata un aumento del 32,5% de las infracciones; en la capital regional, el ascenso alcanza el 29%. En Illescas, por su parte, las faltas menguan un 7,8%, y un 8% en Seseña.

Los incrementos más notables en Talavera afectan a los robos con fuerza en domicilios y establecimientos (+92%) y los asaltos intimidantes sobre vecinos (+71,4%); también se disparan los ciberdelitos (+233%). En el caso de Toledo, los robos con intimidación sobre ciudadanos se triplican, desde los cuatro del primer trimestre del pasado año hasta los 17 del mismo periodo del año actual (+325%). También se duplican las sustracciones de vehículos, de cinco a diez casos y crecen con fuerza (+74,7%) los hurtos.

En Illescas, pese al dato global positivo, se incrementan los casos de lesiones en peleas; en Seseña, la ciudad de la provincia donde más cae la criminalidad, se duplican, de ocho o 16 delitos, los casos de robos con fuerza en diferentes viviendas y comercios.