Desde hace meses, cuando cerró el hospital Virgen de la Salud, la Asociación de Vecinos La Voz del Barrio, de Palomarejos, ha venido planteando al Ayuntamiento una alternativa para el aparcamiento, que pasaba por dejar 689 plazas libre de pago. Tras el último Consejo de Participación, parecía que el Ayuntamiento iba a escuchar su propuesta, al menos en parte. De ahí la sorpresa e indignación de la Junta Directiva tras el último giro de timón municipal con la ORA.
Uno de los resortes que le ha hecho saltar es la transformación de los aparcamientos libres en el entorno del parque de las Tres Culturas (avenida de Europa) en zona naranja de pago. «¡hala!, a recaudar, y recuperar algo de la disminución de ingresos que se percibía en Palomarejos», se lamenta la Asociación, que recuerda que PP prometió en su Programa Electoral que «quitaría la ORAde Palomarejos». «Pues venga cúmplase , 'Hechos y no Milagros'», apunta con ironía, recordando el slogan electoral.
Pero no es la única «sorpresa» que la ORAha llevado a Palomarejos. La Asocación recuerda que presentó ya en diciembre del pasado año una propuesta bastante comedida que afectaba a 21 calles del barrio con una modificación de la ORA. De forma que se incrementaban 147 plazas de aparcamiento para residentes (verde) y se dejaban 689 aparcamientos totalmente libres. También quedaban con la ORAdeterminadas calles.
En un Consejo de Distrito reciente, su presidente «manifestó a los allí presentes que se aceptaba la propuesta de la Asociación de Vecinos, y en su contra con carácter global y sin especificar calle alguna se afirmaba que las plazas de aparcamiento en verde se duplicarían (de 615 a 1211), disminuyéndose por otra parte las plazas azules y naranja».
Más ORA y plazas vacías. Sin embargo, se lamenta la Asociación, sigue sin recibir respuesta a su propuesta por parte del concejal de Movilidad. Y en este mes de noviembre «hemos podido comprobar que en determinadas calles del barrio la ORA cambiaba de color de la noche a la mañana: de azul a verde y nuevamente a azul, sin saber a qué obedecía este cambio tan rápido de actuación».
Además, «para mayor abundamiento, hemos observado que al menos en siete calles han pintado unos trazos de color magenta en paralelo a los trazos naranja existentes, desconocemos cual será la solución final y cuando se producirá».
Además, «en este momento hay plazas en verde para residentes 'a casco porro' y otras calles en naranja/magenta siguen vacías».
Para rematar, apunta la Asociación, «la línea de autobuses que pasaba desde hace muchísimos años por la calle Rigoberta Menchú, ha sido desplazada a la calle Cuenca con el consiguiente perjuicio para los vecinos de esa zona. Pero todo tiene solución porque podría seguir pasando el 'microbús' de una de las dos líneas que por allí circulan».