Pedro Sánchez consumó ayer en el Congreso de los Diputados la huida hacia adelante y el salto al vacío para gobernar España con medio país enfrentado al otro. Estuvo claro durante la intervención que persevera en su intención de darle la vuelta como un calcetín a la realidad y llamar a lo blanco negro y viceversa. En realidad, le faltó decir que la democracia soy yo y soltó una de las más huecas, cóncavas y sarcásticas carcajadas que se han visto nunca sobre la tribuna de oradores del Congreso de los Diputados. En realidad, parecía la madrastra de Blancanieves antes de volverse loca o Yafar cuando creía haber derrotado a Aladín. Sólo los malos de la película pueden reír a mandíbula batiente con el maxilofacial a punto de estallar. Pero seguía estando muy guapo, con los hoyuelos marcados, las mejillas hacia adentro y las orejas hacia arriba.
Feijoo hizo lo que pudo ante lo que ya sin duda es el rodillo de la mayoría del Congreso, formada por quienes destruyen España y la convierten en un club de varias divisiones, según donde cada uno viva. Estoy esperando a los diputados castellanomanchegos sus explicaciones para defender ante la tierra y los electores por qué han pulsado el botón de la divergencia, el privilegio y la desigualdad. España no se rompe, por supuesto; lleva mil quinientos años sobre la piedra y lo que le queda. Y mira que la han puesto al borde del abismo reyes, gobernantes, presidentes, validos… Esta será una ocasión más donde la nación prevalecerá frente a quienes quieran derruirla. Jueces, fiscales, inspectores de Hacienda, abogados y empresarios casi en su totalidad han expresado su rechazo al acuerdo. Lo más grave para mí es que el Psoe cruza por vez primera en democracia la línea roja de la condescendencia con los violentos. Terrible, verdaderamente siniestro… Esa es la verdadera cruz del pacto que no quieren ver, pero también se refleja en los espejos de Blancanieves o los cóncavos del callejón del Gato.
Sánchez ríe porque será presidente del Gobierno y hace bien, pues le quedan cuatro años por delante verdaderamente duros, con una contestación en la calle sin precedentes. Ha apoyado a Massa frente a Miley, con lo cual ya sabemos cuál es el bueno en Argentina. La presidenta del Congreso borró del Diario de Sesiones las manifestaciones de Abascal, por lo que intuimos cómo actuará el rodillo en cuanto empiece a funcionar. Sánchez, hecha la representación, poco le quedó por decir. Ya estaba Patxi para defenderlo y asegurar que el Psoe luchó contra todas las dictaduras. Como decían los viejos comunistas que combatieron a Franco, ciento y pico años de historia y cuarenta de vacaciones.
España comenzará una legislatura agónica, otra más. Y no pasará nada. Los españoles seguiremos madrugando para levantar este país que nos quiere hacer cachos. Pero cada uno de nosotros sabremos cómo actuar y defendernos de un ataque sin precedentes al derecho, la justicia y la igualdad. Me dicen que las cenas de Navidad serán tremendas y que evitarán hablar de política. Si es ahora cuando está más entretenida… En una cosa lleva razón Borrás. La división ya se ha extendido a toda España, no sólo Cataluña. Una mujer de Barcelona me dijo en Toledo que la política rompió su familia. Vuelta a la casilla de inicio. Tocan tiempos difíciles en que habrá que demostrar lo obvio. Pero no dudaremos en batirnos, siempre con una sonrisa, desde la trinchera de la esperanza.