La idea de que el abandonado proyecto del Quioxte CREA vaya a acoger las futuras Cortes de Castilla-La Mancha ha sido bien acogida por gran parte de la ciudad, tanto por lo emblemático del nuevo uso como por terminar la obra de una vez por todas y rellenar ese importante hueco que existe ahora en la ciudad. Incluso uno de los redactores originales del proyecto aplaude la decisión.

«Un hemiciclo es la solución perfecta para el Quixote CREA», afirma José María de Lapuerta, uno de los tres arquitectos del proyecto original (junto al fallecido Carlos Asensio y Paloma Campo), que reconoce estar «satisfecho de que al fin se haga algo con el edificio».

El estanque de esculturas que  proyectó, así como el escenario reversible al exterior del edificio, es imposible que se mantengan, pero el antiguo Quixote CREA tiene «muchas posibilidades» y ve una fácil adaptación para el parlamento autonómico.

Eso sí, reconoce que habría que cambiar la fachada completamente, ya que la original estaba proyectada en negro y oro, simulando damasquinado, mientras que Lapuerta considera que unas Cortes deben tener «más luminosidad y más transparencia»; dejando entrever que un acristalamiento sería lo más adecuado.

La estructura de hormigón no debe de presentar problemas estructurales, según su arquitecto, aunque sí que habrá que proceder a realizar algunos derribos para adaptar el proyecto y volver a instalar toda la climatización del edificio.

Con todo, habrá que conocer los pasos que va dando la nueva licitación y ver la forma definitiva que tendrá el nuevo proyecto de lo que será la futura casa del pueblo de Castilla-La Mancha.