El concejal de Grupo Municipal Socialista Carlos Vega ha denunciado el «colapso» que ha vivido la ciudad durante este puente festivo fruto de la improvisación, desorganización y la incapacidad del Gobierno de Carlos Velázquez, que ha sumido en el caos a la ciudad durante las jornadas festivas provocando molestias y malestar entre los vecinos.

Carlos Vega señalaba que la falta de previsión de Velázquez se ha dejado notar en prácticamente todos los barrios de la ciudad. Además del Casco histórico «durante estos días se han registrado problemas también en Santa Bárbara, el paseo de la Rosa, el puente de Azarquiel, La Cava, la avenida de la Reconquista, la avenida de Madrid y otras vías que han estado saturadas».

El Grupo Municipal Socialista califica de «extremadamente grave la caótica situación vivida en la ciudad este puente, lo que demuestra que el equipo de Gobierno no es capaz de planificar, ni de activar planes especiales de movilidad y seguridad de modo anticipado. Se han visto totalmente superados por la dimensión que tiene el atractivo turístico, histórico y patrimonial de nuestra ciudad, demostrando una vez más que a Carlos Velázquez le viene grande Toledo».

El concejal socialista aseguraba que la masiva afluencia de visitantes y turistas y la movilización de los propios vecinos de Toledo «era algo totalmente previsible», pero parece que los concejales del equipo de Gobierno «no se han enterado todavía de la ciudad de la que son responsables y están más preocupados por hacerse fotos que en el bienestar de los ciudadanos».

En estos días «ha estado ausente el concejal de Movilidad, la concejala de Seguridad Ciudadana y el propio alcalde mientras la ciudad se colapsaba», ha dicho el edil socialista, quien han insistido en la «falta de gestión y de dirección política ante unas situaciones que se sabía que podían producirse».

«Lo ocurrido este puente era más que previsible y el señor Velázquez ha dado muestras de su pasividad ante las críticas, las quejas, el malestar y las molestias que han provocado los atascos entre los vecinos de Toledo, como hemos podido constatar», manifestaba Vega.

 Esta falta de gestión y de improvisación «se pudo ver también, por ejemplo, con un cambio improvisado de ubicación de las cabeceras de los autobuses urbanos, de la que, además, se informa tarde y mal cuando podía haberse planificado con antelación para no generar molestias entre los usuarios».

Lo sucedido estos días demuestra que «el equipo de Gobierno está desbordado y no es capaz de dar una respuesta efectiva a las necesidades que tiene la ciudad en materia de movilidad. No digamos ya de anticiparlas, como hubiera sido deseado en este puente donde la situación, además de insoportable, para los vecinos de Toledo, pudo ser grave, en materia de seguridad».