Toledo fue recobrando la luz con lentitud a partir de la siete y media de la tarde. El suministro eléctrico  comenzó a llegar a distintos barrios, entre ellos Santa Teresa, Palomarejos o Buenavista, a estas horas, pero el alcalde añadió ayer que la ciudad no alcanzó el 99% de la luz hasta medianoche. 

En este sentido, el Ayuntamiento cerró las puertas en torno a la una de la tarde, suspendió las actividades municipales y habilitó el comité de crisis y coordinó los distintos servicios extraordinarios que se tuvieron que llevar a cabo para que la ciudad viviera con la mayor normalidad posible un apagón de, al menos, siete horas ininterrumpidas.

Si bien, el hecho de que la ciudad recobrara la normalidad a medianoche ha posibilitado que las tres escuelas infantiles abrieran ayer con normalidad. Respecto a los colegios, el Ayuntamiento también estuvo pendiente ayer de los colegios, que permanecieron cerrados por decisión del Gobierno regional. 

En relación a las actividades municipales, el Ayuntamiento volvió a la normalidad y el Patronato Deportivo, la Escuela de Idiomas, el Teatro de Rojas y la Escuela de Música retomaron su actividad por la tarde. 

Pero la anormalidad que produjo el apagón ha obligado al alcalde a firmar un decreto para declarar el  lunes «día inhábil» para que los trámites municipales que los ciudadanos estén llevando a cabo con el Ayuntamiento «no se vean perjudicados». 

El alcalde agradeció esta mañana públicamente la colaboración y el esfuerzo de los servicios de emergencia, de las concesionarias municipales, los trabajadores y las empresas toledanas para minimizar las molestias, inconvenientes y posibles problemas añadidos al apagón. 

En este sentido, Tagus también tuvo que emplearse a fondo con distintas actuaciones. Velázquez aseguró que algunas bombas dejaron de funcionar, lo que provocó una bajada de presión y cortes de agua en distintos puntos del ámbito municipal. En concreto, el problema afectó fundamentalmente al parque comercial 'La Abadía', y zonas residenciales como la Pozuela, el Beato y algunos puntos de Valparaíso. 

Una vez pasado el apagón, Velázquez tiene claro que Toledo  «seguirá vigilante y atenta ante cualquier eventualidad, con los servicios de emergencia preparados» y capaces tal y como se ha demostrado este lunes.