Los destrozos que el paso de la DANA produjo en el conjunto de la provincia han dejado una factura provisional de 200 millones de euros, una cuantía que se incrementará conforme las administraciones públicas, las empresas y los particulares afectados se adhieran a las ayudas previstas tras la declaración de zona afectada gravemente por emergencias de protección civil, aprobada por el Gobierno de España el pasado lunes.
La declaración de zona catastrófica responde a la demanda de los miles de toledanos afectados por las grandes tormentas que sacudieron el centro del país entre el 2 y el 4 de septiembre. «Muchos han perdido mucho y muchos lo han perdido todo», asegura Álvaro Gutiérrez, delegado provincial de la Junta. Más allá de los cuantiosos daños materiales, las ríadas segaron la vida de cuatro vecinos en diferentes puntos de la provincia.
La respuesta institucional tras el paso del diluvio «requería de una acción extraordinaria y rápida». El Gobierno de Castilla-La Mancha mantuvo activo el Plan Específico por Fenómenos Meteorológicos Adversos (Meteocam) desde el 2 hasta el 22 de septiembre. Durante este periodo, el servicio regional de emergencias y urgencias 112 registró 2.168 incidencias en la provincia, el 70% de todas las constatadas en el territorio autonómico. Las localidades más afectadas, según el número de avisos de emergencia recogidos, fueron Casarrubios del Monte (126 incidencias), Escalona (148), Magán (124), Mocejón (143), Toledo (188), Yuncler (101) y Villaluenga de la Sagra (86).
La «desolación e impotencia» se concretaron en la pérdida de infraestructuras municipales y en la imposibilidad de utilizar propiedades privadas. «Se ha resuelto una situación de gran complicación gracias al trabajo excelente del 112 y de los alcaldes y vecinos que han colaborado en tareas de limpieza».
Hasta 36 colegios e institutos de la provincia, repartidos en 21 localidades, sufrieron daños de diversa consideración. Todos los alumnos «ya reciben» sus correspondientes enseñanzas de forma presencial. En el colegio de Arcicóllar, las aulas de infantil han recuperado su actividad a la espera de que el módulo de primaria, aún afectado por la humedad, pueda reabrir. Entretanto, estos estudiantes acuden a las aulas instaladas de forma provisional en la biblioteca municipal.
Las labores de reparación se han centrado en 50 carreteras de la provincia y se mantienen en 17, aunque los cortes de tráfico sólo persisten en dos vías de nivel autonómico. Se trata de la CM-4004, entre Casarrubios del Monte y Valmojado, y la CM-4006, en Bargas. La intención de la Junta es reabrir la primera «en dos meses», mientras que la obra en la segunda concluirá «antes de que termine octubre».
Gutiérrez destacó «la celeridad, el acierto y la eficacia» en la resolución de la avería por la rotura de la tubería de Picadas. La falta de abastecimiento de agua afectó a 71 municipios de la provincia y se resolvió el día 15. La Junta repartió 770.000 litros de agua embotellada y 1,8 millones de litros con camiones cisterna, «medio millón de inversión». En la obra de emergencia del sistema de Picadas «va invertido algo más de un millón de euros».