El año pasado parecía un drama, pero este curso se ha actuado en prevención para poner remedio. La Semana Santa del año pasado contó con la ausencia en su Viernes Santo de la Virgen de la Caridad procesionando por sus calles. La falta de cargadores por parte de la hermandad obligó a la misma a tomar la difícil decisión de que su segunda imagen se quedara en el templo de Santa Leocadia.

Esta situación venía siendo un problema acuciente año tras año en la cofradía del Cristo de la Misericordia y de la Virgen de la Caridad, pero cada edición de este evento de Interés Turístico Internacional se venía solventando aunque fuera con un número muy justo de relevos para los cargadores y cargadoras. 

De hecho, hace dos años, los dos pasos salieron a las calles tras hacer un llamamiento por redes sociales para buscar cargadores, pero el año pasado ni eso. La escasa afluencia de voluntarios acabó con la Virgen esperando en el templo durante la procesión del Viernes Santo.

Para esta edición será diferente. La organización de la hermandad ha actuado en prevención y ya ha conseguido el compromiso, no sólo de nuevos cofrades dispuestos a cargar, sino de voluntarios de otras hermandades de la ciudad que han accedido a echar una mano durante la procesión del Viernes Santo. Durante estas primeras semanas del mes de marzo ya se han producido los primeros ensayos en la cofradía, transcurriendo los mismos con total normalidad y optimismo para que tanto el Cristo de la Misericordia como la Virgen de la Caridad vuelvan a procesionar un año más juntos por las calles de Toledo.

La realidad es que cada paso necesita mínimo 20 cargadores, más todos los posibles para que puedan hacer relevos, y el año pasado apenas se alcanzaron 25, es decir, que ni siquiera fue una cifra para ofrecer relevos de garantías durante el tránsito del Cristo de la Misericordia. Pese a todo, es cierto que el mismo día de la procesión siempre aparece algún cofrade más que no ha acudido a los ensayos y que está dispuesto a cargar, pero como ya mencionaron los organizadores el año pasado, desde la hermandad no están dispuestos a asumir esos riesgos. De ahí que en esta ocasión se haya actuado con la suficiente antelación.

Otra de las novedades para este año es que muchas 'Semanas Santas' después, Pablo Garcés ha dejado de ser el Hermano Mayor de esta cofradía toledana.