El gerente del Patronato Deportivo Municipal (PDM) prefiere referirse al organismo que dirige con su sigla. «No me gusta decir la palabra patronato, es sabido por todos mis compañeros, lo considero un término arcaico», explica Nacho Andrada. El concepto pedeeme, así se leería tan particular acrónimo, emerge como «más vanguardista, más moderno», añade. En el interior del pabellón de la Escuela Central de Educación Física presume de una obra a la que ha tratado de incorporar su sello y desgrana las claves del nuevo modelo de gestión deportiva que el forfait descorcha.
El pabellón de la Escuela Central de Educación Física ultima su renovación. ¿Qué mejoras incorpora?
En este último año se ha vivido una gran evolución del proyecto inicial. La eficiencia energética ha sido uno de los factores importantes para solicitar los fondos europeos. La distribución del edificio ha cambiado radicalmente respecto a lo que había: antes existía una sala grande, conocida popularmente como la sala de esgrima, que se ha reconvertido; además, se ha duplicado una de las alturas del edificio y han aparecido cinco nuevas áreas o espacios de actividades. El desarrollo del proyecto aumenta el potencial del PDM.
¿Y respecto al plan del anterior equipo de Gobierno?
Las mejoras han sido todas. Realmente, el anterior equipo de Gobierno no tenía proyecto, solo disponía de una solicitud de fondos económicos que, lógicamente, era favorable. Ese es un punto de inicio, pero una vez llegaron las elecciones el plazo se extinguía. De muy buena manera, la gestión del equipo de Gobierno actual se encargó de redactar un proyecto exprés con una posterior modificación que ha permitido la ejecución eficiente del mismo, gracias también a la colaboración de la dirección facultativa y a las aportaciones del PDM y la Concejalía de Deportes. Ahora tenemos una maravilla para un Toledo del siglo XXI.
¿Será el modelo a seguir en posteriores renovaciones de espacios deportivos?
Vamos a intentar llevar a otros espacios de la ciudad el modelo deportivo que hemos ideado para el PDM, un organismo que tiene más de 50 años y un modelo que está cambiando. [Santa María de] Benquerencia podría ser uno de los puntos más sencillos, por las instalaciones que tenemos y que se están remodelando, para implementar el nuevo concepto. Se empezó con la modificación del gimnasio, de la sala fitness, y ahora se trabaja en dos espacios importantes, dos salas de actividades de las que una era un almacén prácticamente abandonado, casi un depósito. Lo hemos vaciado y estamos en la fase de diseño de un programa para aquella zona.
¿En qué consiste el forfait? El Ayuntamiento considera que va a revolucionar el deporte en Toledo.
Forfait es una palabra que está vinculada tradicionalmente al mundo del esquí. Es un término francés que significa paquete. Tengo los conceptos de imagen y estética en la cabeza, me parecen importantes. Hubo varias reuniones entre los técnicos y las personas que dirigimos el PDM: en una tormenta de ideas que hicimos sobre posibles nombres para el nuevo modelo deportivo surgió este concepto.
El forfait es un conjunto de actividades, también el gimnasio o la sala de cardio, que se desarrollan en unas instalaciones nuevas, muy de vanguardia. Además, existen unos recursos técnicos propios de la generación digital actual. Esta idea ofrecerá a muchísimas personas de Toledo y otras localidades periféricas un momento a lo largo de la semana en el que ejercitar su práctica deportiva favorita por una cuota única de 24,99 euros mensuales. En principio, no va a tener la limitación de estar empadronado o no en la ciudad.
Lo que buscamos es que muchas familias que ya son usuarias del PDM permanezcan dentro de la instalación con el forfait mientras sus hijos hacen alguna actividad deportiva. Que puedan cultivar cuerpo y mente porque la práctica deportiva también tiene esa finalidad de la mejora de la salud. Y que esas personas puedan conciliar al mismo tiempo que fomentan su rendimiento deportivo.
Cerca del remozado pabellón habrá nuevas pistas de pádel.
Las Concejalías de Deportes y Obras son las que fomentan las nuevas instalaciones. En el plan de infraestructuras que anunció el alcalde en la gala del deporte, se mostró, entre otras actuaciones para este recinto, la construcción de cinco nuevas pistas de pádel. Es un proyecto que se baraja por la demanda actual. La saturación de la lista de espera en deportes de raqueta es bastante elevada.
Además, creemos que las pistas de pádel que tenemos, y es algo que cualquier ciudadano puede comprobar, no son las mejores. Incluso la orientación se debería mejorar. Lo que haríamos es favorecer que sus practicantes habituales tengan un entorno que esté a la altura, unas instalaciones acordes a esta época y al nuevo pabellón.
La zona de Tres Culturas es uno de los grandes espacios deportivos de la ciudad.
Pero hay que diferenciar el parque de las Tres Culturas de la Escuela Central de Educación Física. Toda la superficie se adquirió a la Academia de Infantería, pero una vez fue comprada se hicieron dos espacios diferenciados. La gente, a veces, no es consciente de si está transitando por un parque o lo está haciendo por un área deportiva, con las limitaciones que la ley impone respecto al alcohol, el tabaco o el paseo de animales. Por ejemplo, en el área deportiva está prohibido ir con perros, excepto perros guía.
La pista de atletismo cumplirá cien años en 2028 y fue una de las pioneras en los ámbitos nacional e internacional. Desde que Rubén Lozano es concejal de Deportes su prioridad ha sido acondicionar la pista Fernando Fernández Gaitán, además con el acertado bautismo de la instalación. Como Lozano es también concejal de Medio Ambiente trató el arbolado, replantó algunas unidades con peligro y mejoró el paso a la antigua fuente. Lo principal que se ha conseguido es hacer una pista accesible. Y posteriormente, lo más reciente, ha sido la adquisición de un hangar cobertor para la zona de salto de altura, un diseño pionero.
¿Cuándo reabrirá San Lázaro?
La previsión de la Concejalía de Deportes es tenerlo este año. Se va a destinar, principalmente, a esgrima, aunque se incorporarán otras modalidades. Habrá que ver cómo queda la condición final de la instalación y qué práctica deportiva se puede hacer. Se valora la posibilidad de llevar taichí, deportes de combate, yoga o pilates. Son muchas las modalidades que están encima de la mesa; Lozano, incluso, llegó a comentar la opción del tiro con arco indoor.
¿Cuáles son las siguientes instalaciones que reformar?
En el Polígono se ha trabajado en la piscina de verano, que tenía un problema importante [fugas]. También se están haciendo obras en el interior del pabellón polideportivo y en la piscina cubierta, donde ya se ha puesto en marcha un vestuario mixto que era una reivindicación de muchos colectivos sociales.
En general, hay mejoras en todas las instalaciones. Por ejemplo, en Santa Bárbara se está actuando dentro del tatami y reacondicionando las salas, que también eran almacenes. En breve también se habilitará un gimnasio en ese pabellón, demandado por los clubes de balonmano. Hay muchos proyectos sobre la mesa que, lógicamente, tienen que tener su previsión y su organización a corto y medio plazo.
¿Qué vínculo tiene Nacho Andrada con el deporte?
Soy un fanático del mundo del motor. Y el primer deporte que conozco desde muy pequeño, y quizás sea algo atípico, es el béisbol. En el barrio donde yo vivía, en Illescas, los de la generación de los setenta y ochenta que estábamos en la calle jugábamos al béisbol. Me regalaron un bate que era el único oficial que había, pero no lo usábamos porque éramos tan sumamente malos que preferíamos una pala plana para poder golpear.
Luego, en el instituto, estuve en el Club Baloncesto Illescas en los años ochenta. De ahí, pasé a la bici montaña. Tengo en la mochila el haber sido el precursor de esta disciplina en Illescas, junto con un amigo. Creo que tuve una de las primeras bicicletas Scott que vino a España, todavía la conservo.
Reconozco que nunca he sido un gran deportista. Pero cuando empecé a vivir el deporte en la calle, gestionaba mucho su práctica. En Illescas, organizamos carreras de bicicleta montaña; en el instituto, una liga de voleibol. Lo último han sido unos días años federado en tiro olímpico tanto en la Comunidad de Madrid como en Castilla-La Mancha.
De los más de 200 eventos que incluyen los actos por la distinción ciudad europea del deporte, ¿hay alguno que llegue para quedarse?
Recuperar la Subida Imperial me hace mucha ilusión y ojalá permanezca. Es un rally de montaña que se va a hacer este año [el sábado 7 de junio]. Ojalá la Fórmula 1 algún día invadiese Toledo: por fortuna, lo vamos a tener muy cerca, en Madrid, dentro de un año, pero que llegase algo aquí me haría mucha ilusión.
Dentro del calendario hay eventos que están dirigidos a la población general, al deporte en los barrios que les acerca la actividad física y las distintas modalidades adaptadas, también hay muchísimas pruebas consolidadas. Toledo es una ciudad que ya hace mucho deporte en la calle. Además, hay eventos y torneos en los que vinculamos a clubes deportivos de la ciudad y el tejido deportivo en las modalidades específicas que practican ellos.
El abanico va desde lo más básico y fundamental de los barrios hasta el nivel profesionalizado o el deporte estelar. Podemos tener grandes eventos que aún no se pueden desvelar.
¿Qué porcentaje de toledanos hacen deporte?
La proporción nunca me va a gustar: da igual la cifra, pero nunca va a ser la mejor. De los 5.800 inscritos en actividades deportivas que hubo el año pasado [en el ciclo 2023/24] hemos pasado a 6.300 inscritos en la actividad deportiva consolidada que son, principalmente, las escuelas deportivas. Es un incremento del 10%, pero es una cifra que respecto al conjunto de la población tiene que seguir incrementándose.
Actividades como el forfait no van a restar práctica deportiva de las escuelas; lo que vamos a hacer es poner en la puerta de esas personas que están en su casa sin hacer práctica deportiva unos espacios para que, cómodamente, bajo el rigor profesional de un técnico deportivo o bien bajo su ritmo y criterio personal, puedan hacerlo.
¿Se debe impulsar alguna disciplina?
Hay que resolver las listas de espera en prácticas como la natación, el fútbol, los deportes de raqueta o el voleibol, que me gusta mucho, idealiza estéticamente el deporte y es una modalidad deportiva que vamos a explotar de forma significativa con la apertura del nuevo pabellón de la Escuela Central de Educación Física.
¿En qué mejora su gestión del PDM a la pretérita?
Me he encontrado un PDM con problemas de personal, con algunas instalaciones que están o estaban prácticamente abandonadas y en las que se había invertido muy poco para regenerarlas, y con un programa que tendía a ser continuista. Lo primero que hemos hecho es trabajar desde dentro, regulando y normalizando el organigrama funcional de la sede central, impulsando el puesto de director y el de los responsables de otras áreas. Con el equipo humano tenemos la experiencia, el conocimiento, las iniciativas y el impulso para un PDM nuevo.
Desde ese núcleo central, se ha remodelado totalmente la imagen del PDM, se ha creado una nueva línea de proyectos en la que el primero será el forfait. A través de la catapulta de la ciudad europea del deporte de 2025, estamos dando a la ciudadanía una fecha de cambio. Esto no se va a conseguir en un año, ni en dos, ni en una legislatura, pero sí tenemos una previsión a futuro de establecer las bases del deporte para la ciudad después de una trayectoria bastante calmada en los últimos 50 años.
El gerente tiene que impulsar, ser una célula de funcionamiento autónoma bajo el paraguas del presidente [es Rubén Lozano]. Y desde el puesto de gerente hay que intentar buscar el potencial que hay fuera y dentro del PDM respecto a infraestructuras, recursos, convenios y acuerdos con otras áreas a nivel municipal o con otros municipios.
La subida de tasas ha generado cierto malestar entre usuarios y clubes. ¿Era imprescindible? ¿Se podría haber repartido en años venideros?
Ya se ha manifestado tanto por el alcalde como por el concejal de Deportes. Y yo estoy en su misma opinión. Creemos que la ciudad tiene que mejorar sus instalaciones, que se tenía que regular la práctica deportiva y lo que cuesta. Y que era necesario. El prorrateo se sugirió hace diez años o más, pero nunca se llegó a acometer. Se propuso la reducción de una bonificación progresiva a los clubes deportivos para llegar al 50% durante los cuatro siguientes años. Y no se hizo, con el consiguiente estrangulamiento en las actuaciones de del PDM y de las posibles mejoras de las instalaciones. Nos hemos encontrado con una situación en la que la práctica deportiva en la ciudad corría peligro y había que tomar una decisión.
Se ha facilitado siempre la información previa a los clubes deportivos y se les ha cuidado al máximo con compromisos posteriores a ese aumento de la tasa.
¿Cómo es la relación del PDM con los clubes deportivos toledanos?
Muy buena. Los clubes han aceptado ese incremento de tasas que repercute directamente sobre la ciudad y ya visualizan esas mejoras que se incrementarán a lo largo los próximos años porque habrá mayor capacidad para acometerlas.
El deseado pabellón multiusos se va a levantar entre el parque del Crucero y la estación de autobuses.
Para que esa instalación sea un éxito, hay que convencer a la ciudadanía y a los que vayan a promover tal instalación que un palacio multiusos no sustituye a una instalación deportiva. Porque un multiusos tiene un porcentaje de usos deportivos, pero hay otro porcentaje de usos culturales, ferias, exhibiciones y exposiciones. Es una herramienta de uso múltiple. Aunque es mucho más sencillo adaptar un espacio multiusos a una instalación deportiva de forma ocasional, que convertir una instalación deportiva en un palacio de congresos.
Desde el PDM hemos aportado documentación al nuevo multiusos. Hemos visitado varias instalaciones deportivas antes de hacer ese informe y hemos añadido lo que nos han contado, de primera mano, los gestores de esas instalaciones deportivas de diferentes puntos de España. Hemos estado en Guadalajara, pero también ha habido contactos con otros municipios incluso de Cataluña, País Vasco y Galicia.
La ciudad cuenta con muchas instalaciones, pero repartidas por un término municipal inmenso. ¿Se podrán, en algún momento, centralizar?
Ojalá, fíjese lo que le digo. Soy partidario de concentrar los núcleos de práctica deportiva. Sé que puede ser una medida conflictiva en el nivel político respecto a los barrios, pero se podría solventar con una buena red de transporte público, como se está poniendo en marcha por el Ayuntamiento con la flota de autobuses eléctricos y la creación de nuevas líneas.
Imaginemos que la ciudad contase con esas áreas de concentración: ¿qué ocurriría si tuviésemos en un mismo espacio tres piscinas cubiertas, tres piscinas olímpicas y dos vasos grandes más todo lo que hay alrededor? Imaginemos el potencial de ese centro acuático.
Lo que ocurre es que Toledo tiene una brecha que no podemos resolver. La planificación urbanística de la ciudad condiciona y lo hace tanto con las líneas de autobús que de un punto a otro pueden recorrer 15 kilómetros de longitud como con las instalaciones deportivas.
Tener todas las instalaciones deportivas en todos los barrios y cerca de la ciudadanía es un hándicap importante. Y, además, un pabellón como el de la Escuela Central de Educación Física no puede ser multideportivo: en un mismo lugar no se puede practicar baloncesto, balonmano con resina, bádminton, voleibol o fútbol sala. Eso, en un municipio pequeño donde solo hay una instalación es viable porque no hay otra alternativa. Pero aquí tendríamos que intentar profesionalizar los pabellones. Primero, porque los que utilicen ese pabellón tendrán un mayor volumen de recursos. Y segundo, porque de esa manera haremos una sectorización. De hecho, Santa Bárbara ya está muy centrado en el balonmano, Benquerencia en el baloncesto, y tengo la esperanza de que el nuevo pabellón de la Escuela lo haga con el voleibol, porque para fútbol sala tenemos el Javier Lozano.
¿Qué futuro aguarda al velódromo del Polígono?
Era una instalación que estaba prácticamente sin uso y el concejal de Deportes quiere recuperar. Hay varias propuestas encima de la mesa que yo creo que debe ser él quien las debe hacer públicas en el momento adecuado. Lo que sí le aseguro es que van a suponer un nuevo espacio deportivo que estaba sin uso y vamos a recuperar para deportes muy interesantes.
¿Cabe una segunda piscina en este barrio?
Hay que ordenar el espacio deportivo de Benquerencia. En el caso de la actual piscina al aire libre, se debe recordar que, aunque el PDM asuma el ocio del verano, no es una instalación estrictamente deportiva, sino una instalación de ocio.
Apuesto porque en la ciudad, en el lugar que se considere, podamos tener un gran vaso, y me permito exagerar, de 50 por 25 metros. Sería una instalación brutal con un número de calles transversales enormes. Es algo que disfrutamos en verano porque tenemos en tres piscinas de 50 metros. Pero lo ideal es que fuera cubierta. Una gran piscina olímpica puede ser un proyecto en dos o en tres legislaturas. Lo dejo ahí, en el aire, encima de la mesa.
La reconstrucción del estadio Carlos III apuesta por la sostenibilidad. ¿Esperan que sea ejemplo para otros?
Es una gran apuesta, un proyecto piloto que se copiará por otras ciudades. Los materiales que se han utilizado durante los últimos 15 o 20 años para los campos de fútbol de césped artificial tenían generaban unas consecuencias medioambientales que se han comprobado ahora, pero en su día no se pensaron, entre ellas, los microplásticos y el caucho. Con las bolas de caucho hay una directiva europea que prohíben su uso futuro. Por tanto, hay que buscar qué elementos alternativos se pueden compatibilizar u homologar en lugar del caucho.
A través de un laboratorio de la Universidad Castilla-La Mancha que dirige Leonor Gallardo, hemos conseguido una subvención de la FIFA para experimentar con nuevos materiales. Que Toledo haya sido elegida para tener una nueva instalación supondrá recuperar el campo del Carlos III, el de la antigua Fábrica de Armas, el lugar donde la Unión Deportiva Santa Bárbara tuvo una gran historia. Asimismo, supondrá añadir una nueva instalación a la ciudad y, algo que me preocupa bastante, revitalizar esa brecha verde que tenemos en Vega Baja.