IU ha propuesto a nivel regional dos alegaciones a la modificación de las Normas de Explotación del Trasvase. En la primera, plantea el cierre del mismo en cinco años «porque es el elemento fundamental que hace que la ley no se cumpla; los caudales ecológicos a su paso por Toledo no se cumplen porque el trasvase está garantizado mes a mes». Además, pide aumentar los mínimos para el trasvase, que Cospedal dejó en 400 hectómetro en Entrepeñas y Buendía. Para garantizar una lámina de agua segura para pantanos, municipios ribereños y Tajo, IU propone doblar todos los mínimos, hasta los 800 hectómetros en el nivel 4. Cree que así se garantizarán los caudales ecológicos, flora, fauna, bosque de rivera y que el río sea río en todo su curso.

Así lo ha explicado el  edil de IU en el Ayuntamiento de Toledo, Txema Fernández, quien ha criticado este jueves, último día para presentar alegaciones a esta cuestión, que el equipo de Gobierno ni haya debatido las suyas en el Consistorio, ni siquiera haya informado de ellas en un ámbito creado para estas cuestiones, como es el Consejo Municipal del Pacto por el Tajo. Ante esta circunstancia, Fernández valora que el Gobierno municipal «no tiene ni derecho, ni legitimidad» para presentar sus alegaciones en nombre de un Ayuntamiento al que ni ha informado. Mientras tanto, hoy todo el caudal del Tajo sigue cabiendo por el espacio roto en la presa de Santa Ana.

Critica la postura de PP y Vox en Levante. El PP «en Murcia y Valencia quiere que siga habiendo trasvase porque garantiza los riegos de las plantaciones presuntamente ilegales de regadíos, en un modelo insostenible desde el punto de vista medioambiental». Vox sigue apostando por un Plan Hidrológico Nacional «sin ningún tipo de conciencia ecológica, ni de solidaridad entre regiones». El PSOE por su parte va a presentar alegaciones desde el Ayuntamiento, aunque sus compañeros de Levante piensen otra cosa.