El equipo de Gobierno está manteniendo ya contactos con colectivos de vecinos y comerciantes de cara a la implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) a lo largo de este año. Así lo ha confirmado el portavoz municipal, Jesús García-Barroso, a preguntas de los periodistas este lunes sobre el estado de este proyecto y del proceso de participación ciudadana que anunció a partir de enero con colectivos de la ciudad para su definición.
García-Barroso ha confirmado que ya se está contactando con colectivos, en concreto vecinales, y ha recordado en este sentido las visitas que el alcalde, José Julián Gregorio, está realizando a los diferentes barrios de la ciudad, acompañado de las directivas de las entidades vecinales.
Como ha recordado, esta ZBE afectará principalmente al Casco talaverano y de ahí que se esté contactando en relación a este proyecto en especial con vecinos y comerciantes de este área para conocer sus «necesidades» y recabar sus «propuestas».
El portavoz ha recalcado que este proyecto es «un proceso complejo» con el que se pretende «dar solución y satisfacción a todas y cada una de las personas que están más directamente implicadas». En concreto, se ha referido a los vecinos de esta zona declarada Conjunto Histórico, así como a los proveedores, servicios de seguridad y demás conductores que han de acceder a este entorno que estará restringido al tráfico rodado.
Asimismo, se aborda con comerciantes y establecimientos de la zona este proyecto, que desde el Ayuntamiento quieren tener «lo más cerrado posible o, por lo menos, una primera aproximación, a finales del mes de mayo». A partir de ahí, ha apuntado, se seguirá «trabajando para que la ciudadanía pueda seguir opinando, puesto que es un proceso colaborativo».
Jesús García-Barroso ha precisado que el plazo para la implantación de esta Zona de Bajas Emisiones se extiende hasta final de año, por lo que no hay una «urgencia limitativa inmediata» del tráfico, sino que se puede poner en marcha «a lo largo del año». «Todavía tenemos margen de seguir trabajando y perfilando la propuesta», ha apostillado. De hecho, desde el Consistorio talaverano se ha solicitado una ampliación del plazo para ejecutar el contrato dirigido al suministro y obra para la implantación de esta ZBE.
La calle Trinidad, como se avanzó la pasada legislatura, será la primera en estrenar esta ZBE, aprovechando que ya cuenta con limitaciones a la circulación de vehículos. Una medida para la cual «todavía no hay fecha», según ha confirmado el portavoz municipal, quien ha insistido además en que será un paso «suficientemente participado para que no genere ninguna disrupción importante».
Lo que sí está clara es la delimitación de esta ZBE, que ya se anunció en el mandato anterior, y en la que no se han producido cambios, tal y como ha señalado este lunes el actual portavoz de equipo de Gobierno.
conjunto histórico. Esta ZBE consta de un núcleo compacto conformado por la zona de Conjunto Histórico, al que se suma como zona complementaria puntual la calle Trinidad, separada de la anterior por la calle Alfares. Dispondrá de puntos de control de acceso mediante cámaras de lectura de matrícula y de contexto en los puntos situados en la calle San Isidro, Capitán Velarde y Trinidad.
La cuestión a definir ahora es «cómo implementar el sistema para hacerlo lo más conciliado posible con todos los intereses de los ciudadanos».
Como ha recordado el portavoz municipal, la implantación de este proyecto responde a la obligatoriedad de las ciudades de más de 50.000 habitantes de contar con este espacio restringido al tráfico. «Hay que aplicarlo en un plazo y se debe aplicar», ha subrayado García-Barroso, quien ha añadido que desde el Ayuntamiento de Talavera,«dentro del marco de la legalidad, se actuará aplicando ley buscando aquellas soluciones que resulten lo más conciliadoras posibles con los intereses de toda la ciudadanía».
Al respecto, ha querido remarcar que no se atenderá solo a las demandas de los vecinos de esta zona, sino «del común de toda la ciudadanía y de su entorno», como es el caso de los vecinos de la comarca, que son «los que acceden con sus vehículos, que vienen aquí a hacer sus compras a Talavera». «Cuanto más fácil tengan el acceso, mucho mejor para todos, pero siempre desde la perspectiva del cumplimiento de la legalidad», ha trasladado.