Lasa, Jarni, Dorado, Bermejo, Raúl Bravo, Paredes, Torres, Alonso, Heinze, Casado, Coentrao, Theo, Reguilón, Fran García, Mendy, Javi Hernández y Miguel Gutiérrez, una lista de 17 tipos a los que añadiríamos otros laterales izquierdos ocasionales para explicar la longevidad asombrosa de una pareja peculiar. Ambos zurdos, brasileños, relativamente pequeños, prietos, de largo recorrido, vocación ofensiva (atacantes camuflados, diría Bielsa), fútbol alegre, desbordante carisma… y una trayectoria asombrosa: entre ambos han ocupado 26 temporadas de carril zurdo en el Real Madrid. Y con el adiós del segundo se cierra un ciclo histórico. Firmado, Roberto Carlos y Marcelo.
José Antonio Camacho dejó huérfana la línea de cal izquierda del Bernabéu en la 87/88, a los 32 años. Por allí pasaron Esteban, Solana, Villarroya o Mikel Lasa, e incluso en la caótica 95/96 (con Valdano, Del Bosque y Arsenio pasando por el banquillo) Alkorta hizo las funciones de lateral izquierdo. En un negocio histórico para el club, el Madrid pagó apenas seis millones de euros al Inter de Milán por aquel chico de 23 años de voz aflautada y muslos como columnas.
Roberto Carlos da Silva, por entonces casi un desconocido, reventó todos los pronósticos. Disputó 11 campañas, convirtiéndose en una pieza fundamental de los éxitos merengues de la época, particularmente ese 'tres en raya' con la séptima, octava y novena Copa de Europa (1998, 2000 y 2002). Ese mismo curso, en el que además logró el Campeonato del Mundo con Brasil, equipos como el Manchester United o el Inter de Milán pusieron cheques en blanco a sus pies… pero el Madrid renovó su contrato hasta 2007.
Récord y relevo
Gracias a esto, superó a Alfredo di Stéfano como el jugador no nacido en España con más partidos oficiales disputados con la camiseta del conjunto de Chamartín (527, en los que marcó 69 goles y dio 86 asistencias), un récord que después han superado Karim Benzema (605) y su paisano y 'heredero', Marcelo Vieira (546).
El jugador de Río de Janeiro llegó a la capital española por la puerta trasera, sin meter demasiado ruido, y con un precio curiosamente parecido al de su compatriota, apenas 6,5 millones. Era una apuesta arriesgada: el chico tenía 18 años cuando llegó procedente del Fluminense. «Es el sustituto de Roberto Carlos», dijo entonces Ramón Calderón, presidente del club. Después de un año de convivencia entre ambos (la 06/07), el 'hermano mayor' firmó por el Fenerbahçe, Schuster devolvió a Gabi Heinze a la posición de central izquierdo y Marcelo se adueñó del puesto.
Técnicos como Juande Ramos o Pellegrini prefirieron su vertiente ofensiva e incluso le hicieron jugar como interior zurdo o, directamente, como extremo (terminó la 09/10 con cuatro goles y nueve pases de gol, pero su estatus siempre estuvo asociado al del carrilero de largo recorrido y ciertos agujeros defensivos que compensaba sobradamente con irrupciones en ataque. Ahí está un legado de 38 goles y 101 asistencias en 16 campañas en las que ha logrado categoría de mito merengue: con la Copa de Europa lograda el sábado pasado en París, Marcelo abandona el equipo de su vida con 25 títulos, superando a una leyenda como Paco Gento.
Con Ferland Mendy (26 años) el presente y el futuro están sobradamente atados... pero ya no será lo mismo.