La 'bomba' que explotó el pasado jueves sobre el futuro de Kylian Mbappé alteró los cimientos del fútbol europeo. El jugador, que anunció al PSG que no seguirá la próxima campaña, parece más cerca del Real Madrid que nunca.
Hasta Luis Enrique, actual entrenador del cuadro galo, evitó pronunciarse sobre el futuro de su actual estrella. «No diré nada», respondió el asturiano, que no fue capaz de asegurar que el de Bondy podría recalar en la capital española en el próximo curso. Por tanto, todo parece encaminado a que el destino del campeón del mundo estará vinculado al de la entidad de Concha Espina a partir de este verano.
Se pondrá fin a un 'culebrón' de muchos años, de idas y venidas, con el jugador tan cerca de España y a la vez tan lejos. Su incorporación al club merengue supondría el broche de oro a una plantilla que ya ahora mismo es más que temible. Con Mbappé cerca de LaLiga, será tarea de Ancelotti el 'encajar' un rompecabezas en una delantera en la que cada posición del campo siempre está sujeta a debate. Con el ex del Mónaco y Vinícius, está por ver cuál será el tercer elemento en discordia. Y siempre y cuando Jude Bellingham no actúe en una demarcación más retrasada en el terreno de juego algo que, visto su rendimiento, no parece que vaya a ocurrir.
Por tanto, Rodrygo podría ser el gran damnificado. Aunque su papel en la plantilla hace difícil que el brasileño sea desplazado del once. Su polivalencia y experiencia, pese a sus 23 años, son un gran aval para el de Osasco. El tiempo dirá, pero lo que parece más seguro es que, si llega Mbappé, su papel en la plantilla podría ser de menor calado que en esta presente campaña.
Además, otros jugadores del plantel también podrían ver afectado su rol con el fichaje del galo. Un 'bendito problema' para el cuerpo técnico, que contaría con diferentes variantes en un calendario muy exigente.
Brahim, con su verticalidad y desborde, ya ha demostrado que puede ser un gran valor desde el banquillo. El atacante nacido en Málaga ya ha demostrado resiliencia para intentar hacerse un hueco en los planes del preparador transalpino.
A falta de unos meses, Endrick también puede ser un buen activo en la zona de arriba. El todavía delantero de Palmeiras llegará al club blanco la próxima temporada. Con Mbappé, el joven ariete gozará de menor participación al principio, pero podrá convivir sin presión en los primeros meses en su nuevo equipo.
Quien sí podría tener complicado continuar es Joselu. El atacante nacido en Stuttgart podría ser la pieza damnificada ante el 'overbooking' de jugadores. Pese a que su rendimiento está siendo más que notable (12 goles este curso) sus posibilidades se verían reducidas con el fichaje del astro francés. Esta campaña, pese a la marcha de Benzema, ya llegó para formar parte de la conocida 'segunda unidad', aunque las lesiones de algunos compañeros le han impulsado a la titularidad en varios compromisos.
El otro afectado sería Arda Güler. El otomano, que no ha podido gozar de excesiva participación a causa de sus problemas físicos, también podría salir de cara a la 24/25. Una cesión parece la solución más probable para un talentoso jugador que aún precisa de rodaje al máximo nivel.