La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura (Armhex) denuncia que el Ayuntamiento de Fuensalida ha trasladado «a un lugar absolutamente marginal» un memorial en recuerdo de uno de sus vecinos víctima de la dictadura franquista, «en un claro acto de desprecio y con intención de ocultar un hecho de memoria histórica».

La Armhex desarrolló durante el año 2022 el proyecto Exhumación, estudio y posible identificación de los restos óseos hallados en el Cementerio Municipal del municipio de Burgohondo (Ávila). El mismo se ejecutó a través del Ayuntamiento de Piornal, en la provincia de Cáceres, en colaboración con el Ayuntamiento de Burgohondo y consistió en la investigación, localización, exhumación e identificación de personas desaparecidas en fosas de la guerra civil y el franquismo, así como las acciones destinadas a su dignificación.

El proyecto contemplaba, según marca la ley, que en el caso de no poder identificar y entregar a sus familiares los restos, se devolverían al ayuntamiento de la localidad donde se encontraban para su reinhumación, «como se ha hecho, según documento del Ayuntamiento de Burgohondo de 22 de abril de 2022», destaca la Armhex.

Además, se establecía la colocación una placa de recuerdo en los cementerios de Piornal y de Fuensalida, de donde eran originarios dos de las personas buscadas.

Para ello, la asociación extremeña encargó una placa con el fin de colocarla en un pequeño muro dentro del cementerio de Fuensalida y solicitó «en legal forma el permiso, autorización y colaboración» del Consistorio para este fin.

El memorial, una vez aprobado, fue inaugurado el día 12 de agosto de 2022 con la asistencia del entonces alcalde de Fuensalida, familiares y amigos de Mariano Álvarez Escobar 'Antonio', guerrillero, natural de esta localidad.

En febrero de 2024, la Armhex y familiares de los guerrilleros iniciaron una campaña para evitar que dicho memorial fuera derribado, «dado que se constataron serios indicios de que el nuevo equipo de Gobierno municipal del PP pretendía demolerlo».

La campaña logró que dicho derribo no se llevase a cabo pero «contrariado por la amplia respuesta ciudadana y memorialista», el Ayuntamiento de Fuensalida ha trasladado el memorial, situándolo en un lugar «absolutamente marginal del cementerio».

Esto, a su juicio, supone «un claro acto de desprecio hacia un hecho de memoria histórica relacionado con uno de sus vecinos, invisibilizando con ello a las víctimas de la dictadura franquista», denuncia el colectivo extremeño.

Como protesta y denuncia de estos hechos, los familiares de los guerrilleros asesinados y la Armhex han convocado un acto cívico en defensa del memorial y en homenaje a los combatientes antifranquistas el próximo 12 de agosto (coincidiendo con el segundo aniversario de su inauguración), en el mismo cementerio de Fuensalida.

En dicho acto también colaboran la Asociación por la Memoria Militar democrática (AMMD), la Asociación Manuel Azaña, la Asociación de Familiares de Ejecutados en el Cementerio de Ocaña (Afeco), PSOE de Fuensalida, e IU de Fuensalida.