Autorizan el cambio de uso de locales a pisos en Buenavista 24

M.G
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La constructora ha realizado obras para convertir locales en 6 apartamentos turísticos a pesar de la reticencia vecinal. La Junta de Gobierno Local rechaza la solicitud de revisión de oficio planteada por la comunidad de vecinos para frenar la obra

Los bajos de Buenavista, 24 se convierten en viviendas. - Foto: D. Pérez

El sector inmobiliario  está muy atento a la demanda y en los dos últimos años ha comenzado a ponerse de moda la posible reconversión de locales comerciales en viviendas, dada la escasez de oferta en muchas ciudades. A Toledo tampoco se le ha escapado esta oportunidad y al Ayuntamiento también están llegando solicitudes, aunque quizá la que mayor huella está dejando es la que afecta a la urbanización situada en Buenavista, 24, el caso más llamativo y que más batalla legal está generando por la oposición de la comunidad de propietarios.

El proyecto para la reconversión de un local en seis apartamentos data de hace dos años y medio, pero el Ayuntamiento se ha tenido que volver a pronunciar recientemente a pesar de que ya concedió licencia urbanística a 'VMG Construcciones' el  18 de enero de 2022 para el cambio de uso porque se cumplía con la normativa, que no indica el número máximo de viviendas que pueden habilitarse, y posteriormente licencia de obras para su adaptación.

Sin embargo, la comunidad de propietarios de esta urbanización de 274 viviendas, la de mayor tamaño del barrio, plantó batalla desde el inicio y al margen de llevar el asunto al Juzgado de Primera Instancia de Toledo, que aún no ha resuelto, volvió hace meses a recurrir al Ayuntamiento solicitando la revisión de oficio de la licencia, entre otros motivos, porque no dispone de autorización de la propia comunidad, excede la edificabilidad máxima y contraviene la modificación puntual número 28 del Plan General del 86 al querer construir viviendas en un sótano. 

En este caso, los técnicos municipales han revisado exhaustivamente el expediente y el Ayuntamiento ha decidido mantener la licencia urbanística al considerar que no se vulnera la legalidad y no  ha admitido a trámite la solicitud de la comunidad de propietarios, tal y como se desprende del acta de la Junta de Gobierno local del pasado 5 de abril. 

Uno de los puntos más llamativos de este proyecto urbanístico es el uso final de esos seis apartamentos, ya que todo apunta que serán de uso turístico, según contempla el escrito que presentó el 11 de enero de 2023, tras los acuerdos adoptados por los vecinos oponiéndose tanto al cambio de uso a vivienda como a su destino como apartamentos turísticos. 

Si bien, la licencia municipal concedida no entra en esta última cuestión, únicamente en la reconversión del local y su destino final será objeto de la futura ordenanza que está en estudio en el Ayuntamiento o de la normativa que se pueda aplicar una vez que las viviendas estén listas para habitar.

Anteriores proyectos. La comunidad de propietarios de Buenavista, 24 y el Ayuntamiento se han cruzado numerosa documentación desde hace dos años y medio. No obstante, la administración ha rebatido cada uno de los argumentos en consonancia con la legislación vigente. Sin ir más lejos, el proyecto presentado por la constructora se comprobó y se accedió a la licencia de construcción porque no existían inconvenientes, dado que los propios estatutos de la comunidad de propietarios  «no contienen  prohibición expresa al cambio de uso».

Nueve meses más tarde, la comunidad de propietarios solicitó por escrito su paralización porque no contaba con la autorización de los vecinos. Pero el argumento fue rebatido desde el Ayuntamiento en base a la jurisprudencia actual en estos casos, ya que los tribunales optan por la libertad a la hora de establecer el uso de un inmueble en el ámbito de la propiedad horizontal, salvo «que esté legalmente prohibido o que el cambio de destino aparezca limitado por le régimen de la propiedad horizontal».

Por tanto, el siguiente paso de la comunidad de propietarios fue denegar la reconversión del local y el uso como apartamentos turísticos. A esa comunicación le siguió la solicitud de paralización de obras en el juzgado y la revisión de oficio que ha denegado el Ayuntamiento. 

En este contexto, la comunidad de propietarios argumentó que no se podía construir en sótanos  y que la urbanización excedería el máximo de edificabilidad. En el primer extremo, los técnicos municipales indicaron que al borde de la calle se estableció en ese residencial una zona comercial recreativa «para instalar salones de recreo, guarderías infantiles o uso comercial». Al mismo tiempo, apuntaron que los locales están incluidos en la edificabilidad. 

No es la primera vez que se presenta un proyecto de reconversión para los locales de esta urbanización. Ya en 1993 se obtuvo licencia para la construcción de 52 trasteros a petición vecinal y fue necesario disminuir los despachos profesionales que se iban a habilitar en estos espacios. Al final, solo se ejecutó la obra de los trasteros y el resto de locales se quedaron en bruto hasta que 'VMG' presentó el proyecto de apartamentos.