La bandera arcoíris de los colectivos Lgtbi+ no ondea del balcón del Ayuntamiento de Toledo porque «es evidente que no conseguimos ese acuerdo, o ese gran consenso que yo pretendía», ha explicado el alcalde de la ciudad, Carlos Velázquez. Estas declaraciones contrastan con lo manifestado durante la víspera por su socia de Gobierno, la vicealcaldesa Inés Cañizares, de VOX, para quien no poner la bandera durante la Semana del Orgullo «fue una decisión consensuada por ambas partes». Cañizares dio a entender que no hubo problemas entre los dos partidos de Gobierno y ambos estuvieron de acuerdo en no situar la bandera en el balcón institucional y criticó que se busquen «confrontaciones donde no las hay».

Velázquez ha insistido en que en materia social, como en la urbanística, hay que llegar a grandes consensos en el Ayuntamiento de Toledo, dado que su Gobierno es de coalición, «pero yo no me conformo solo con llegar acuerdos con los partidos que conforman mi Gobierno, sino también con el resto de partidos de la oposición, y seguro que podremos sacar algunos asuntos por unanimidad, y también con el resto de la sociedad».