La Policía Local de Toledo tiene desde hace unos días un olfato más peliagudo de lo normal. Y es que la plantilla toledana cuenta ya oficial y profesionalmente con dos nuevos compañeros de cuatro patas. Son dos perros que vienen a sustituir a Narco, el agente de la fotografía y que ha prestado el servicio durante los años previos sin la oficialidad de la unidad canina que ahora sí se pretende instaurar.
Esa oficialidad depende de la profesionalidad de la misma, puesto que el mencionado Narco no era un perro adiestrado desde su nacimiento para esta función sino que era la mascota de una agente policial de la plantilla y que, a las nociones que ya presentaba el animal, ella añadió nuevas técnicas de adiestramiento para esta labor.
Sin embargo, los dos nuevos fichajes que conformarán la unidad canina de la Policía Local de Toledo han realizado un adiestramiento especializado para intervenir en la detección de drogas, tanto en personas como en el interior de vehículos, otorgando un plus a los servicios antiestupefacientes del cuerpo municipal y para llevar a cabo la sustitución de Narco tras su jubilación este mismo año.
Pese a que la unidad cinológica de Toledo no se ha presentado oficialmente, ya lleva operando como tal desde hace varias semanas. La intención del Ayuntamiento de Toledo, con el alcalde Carlos Velázquez a la cabeza, era la de presentar este lunes a estos dos nuevos miembros policiales en un acto oficial, pero finalmente se ha aplazado para darle prioridad a la búsqueda de soluciones al conflicto que mantienen abierto con la propia Policía Local. De tal modo que para las 11:30 horas de este lunes está prevista la celebración de una reunión entre los representantes sindicales de los agentes, el alcalde y otros miembros del equipo de gobierno.
Según ha podido saber La Tribuna, las conversaciones previas a esta cita entre ambas partes desvelan que la solución al conflicto laboral pasa por la elaboración de un nuevo acuerdo, ajeno al firmado en 2023 y por el que todavía no se han abonado la totalidad de las guardias localizada realizadas por los agentes del cuerpo toledano. Habrá que ver si en caso de llegar a un nuevo pacto, se exoneran o no los pagos aún por percibir o si deberán renegociarse al margen del nuevo convenio que pretenden firmar las partes interesadas.
La reunión se ha precipitado en el calendario después de que Carlos Velázquez y la plantilla policial se vieran las caras el pasado jueves en el Salón de Plenos ante la celebración del Pleno Municipal, donde el propio alcalde mantuvo una conversación con algunos de los agentes y representantes sindicales. La vicealcaldesa y edil de Seguridad Ciudadana, Inés Cañizares, también charló con los afectados transmitiéndoles que ese tipo de actos no iban a servir para agilizar la negociación. Paradójicamente, sea o no por ese motivo, el encuentro se ha previsto para hoy.
Otro motivo por el que se ha podido agilizar esta reunión que, evidentemente no significa que vaya a acabar en acuerdo, es la cercanía de celebraciones como la romería de la Virgen del Valle o el Corpus Christi, ante la falta de refuerzos policiales como protesta a los impagos que podrían poner en entredicho la seguridad de la ciudad.
Sea como fuere, las posturas están más cerca que en las últimas semanas y, además, lo que es un hecho es que la Policía Local de Toledo cuenta a partir de ahora con una unidad canina profesionalizada compuesta por dos miembros dispuestos a ladrarle a la delincuencia.