La agrupación de electores Primero Toledo destapó algunas de las propuestas en materia de bienestar social con que concurrirán a los comicios municipales del 28 de mayo. «Son el alma de este proyecto», aseguró el número uno de la lista, Julio Comendador. Los tres ejes que abordó la candidatura amarilla incluyen la creación de la figura del trabajador social de guardia, la modulación de diferentes actividades para aumentar la inclusión en la ciudad y el tejido de una red de viviendas públicas en alquiler para personas de la tercera edad.
Los pisos para mayores tratan de evitar el «desarraigo» que sufren los mayores que se ven abocados a internar en una residencia o a vivir con sus hijos. Primero Toledo quiere que la administración municipal ofrezca un solución habitacional en régimen de alquiler «asequible», a partir de la renta per cápita «de cada uno», un coste que suponga -aproximadamente- entre el 20% y el 25% de los ingresos que percibiría cada arrendatario.
Desde la agrupación de electores apuntan a Palomarejos como uno de los escenarios en los que mejor acomodo encontraría esta propuesta. La lista que lidera Comendador señala al barrio que se articuló alrededor del hospital Virgen de la Salud como una zona adecuada por su mayor disponibilidad de suelo y para que «no pierda su contenido sociosanitario». La red de hogares, en cualquier caso, se intentaría extender por «todos los barrios» de Toledo, evitando la formación de «guetos» y propiciando un modelo de casa «sin barreras arquitectónicas, con ducha en vez de bañeras, con otras personas de su edad próximas y oferta de equipamientos y actividades», explicó la responsable de Servicios Sociales, Mayores, Familia y Personas con Discapacidad de la candidatura, Mari Paz García Butenegro.
Para Primero Toledo «una ciudad inclusiva tiene que incluir a las personas mayores». Además de este colectivo, la agrupación remarcó su compromiso con aquellos vecinos en peor situación, para quienes pidió un Ayuntamiento «al rescate» cuando sus circunstancias lo requieran. Comendador afeó al equipo de Gobierno «no salir al encuentro de esas personas vulnerables» y reclamó la implementación de medidas efectivas. Una política de bienestar social «no es quedarse sólo en saludar a los vecinos, es atenderlos», proclamó.
La idea de «diseñar un área de bienestar social» reforzado para mayores, familias y personas con discapacidad, un departamento encomendado a García Butenegro, surge del «margen de mejora» en esta competencia detectado por la candidatura. Como ejemplo, aludieron a los «dos y tres meses» que se tarda en concertar una cita con servicios sociales. «Cáritas no está para hacer lo que no hace el Ayuntamiento».