La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (Ciaiac) ha recomendado a los propietarios del aeródromo de Casarrubios del Monte que limpien toda la chatarra de las zonas aledañas a la pista y calles de rodaje en las que no haya instalaciones para prevenir incendios o daños de importancia en casos de salida de pista como la ocurrida el 17 de junio de 2023. Los dos ocupantes salieron ilesos.

Se trata de la recomendación incorporada al informe técnico final del accidente más reciente ocurrido en España con las conclusiones de la Ciaiac, dependiente del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible. La aspiración de estos trabajos investigativos es la prevención de futuros incidentes sin el rigor del ámbito judicial.

El informe técnico final, aprobado el 27 de septiembre de 2023 y publicado en la página del ministerio, establece que la causa probable del accidente de la aeronave se debió a la realización incorrecta de la maniobra de aterrizaje. «La carrera de aterrizaje calculada de acuerdo con las condiciones que había es de 346,6 metros, y el avión recorrió aproximadamente 260 metros por la pista antes de irse al aire de nuevo, lo que indicaría que el piloto no cortó la potencia del motor. Y esa fue probablemente la causa por la que el avión se fue de nuevo al aire», dice en el análisis.

No obstante, sí advierte de que la zona donde impactó el aparato se encontraba llena de chatarra «totalmente descontrolada, como si de un verterdero se tratase». Así, añadía que podía ocasionar que los muchos elementos metálicos desperdigados se clavaran en una rueda y ocasionase un pinchazo.

La Ciaiac lanza esta recomendación sobre la chatarra cercana al depósito de combustible.

El piloto, un hombre de 63 años con licencias de Alemania y Estados Unidos y una experiencia de más de 700 horas de vuelo,  y un pasajero ocupaban la aeronave accidentada, que salió de la localidad portuguesa de Faro con destino a Casarrubios del Monte. El piloto realizó tres intentos previos de aproximadación a la pista, pero sin concretar la maniobra de aterrizaje, según detalla la investigación en las conclusiones. Asimismo, añade que tocó cuatro veces en el asfalto sin conseguir mantener el avión en la pista. Después aceleró el avión y se desvió a la izquierda, con una ligera elevación. La aeronave impactó contra una estructura metálica y tuvo daños importantes.

La aeronave presentaba daños de importancia en la parte frontal. El cono de la hélice estaba aplastado. El parabrisas, roto en la zona del pasajero. El plano derecho estaba muy dañado, con un fuerte golpe en la mitad del borde de ataque, que produjo deformación.