Talavera demostró una solidaridad sin precedentes el 11-M

Leticia G. Colao
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30.000 personas se echaron a la calle en una manifestación histórica para mostrar su consternación por la masacre de los trenes

Talavera demostró una solidaridad sin precedentes el 11-M - Foto: Manu Reino

La ciudad de Talavera, como el resto de España, se echó a la calle para mostrar su repulsa por los atentados del 11-M en una manifestación sin precedentes. El 12 de Marzo, y a pesar de la lluvia, 30.000 talaveranos decidieron formar parte de una movilización pacífica pero cargada de rabia por el suceso que un día antes acabó con la vida de 193 personas en trenes de Madrid.

Siglas y colores políticos, edades y nacionalidades se quedaron a un lado cuando el objetivo era luchar contra el terror. Los políticos dejaron de lado sus desavenencias para realizar juntos un recorrido cuyo destino final era la unidad de todos los demócratas. Todos a una, consternados por la masacre en la capital española, aunaron dolor para mostrar su total rechazo al mayor atentado perpetrado en Europa.

La pancarta que abría la interminable manifestación, bajo el lema 'Con las víctimas, con la Constitución, por la derrota del terrorismo' fue portada por diferentes representantes de los sectores sociales de la ciudad: trabajadores, jóvenes e inmigrantes, algunos de los colectivos más afectados por la tragedia de Madrid. En segundo plano, y de luto riguroso, el entonces alcalde de Talavera, José Francisco Rivas, quien realizó el recorrido codo con codo con la jefa de la oposición, Carmen Riolobos.

Talavera demostró una solidaridad sin precedentes el 11-MTalavera demostró una solidaridad sin precedentes el 11-M - Foto: Manu ReinoEntre velas en señal de duelo, manos blancas, lazos negros y diversidad de pancartas que reflejaban el sentir de la ciudadanía, Rivas leyó ya en la plaza del Pan el comunicado de repulsa del Ayun tamiento talaverano. Emocionado por la masiva respuesta ciudadana y con lágrimas en los ojos, comenzó agradeciendo el apoyo de todos aquellos que, con su marcha pacífica, reivindicaron el triunfo de la justicia, la libertad y la democracia como principales valores entre los derechos humanos.

«Recogemos el sentimiento de dolor, rabia e indignación de nuestros vecinos, conmocionados por la muerte de tantos inocentes, por la sinrazón, el fanatismo y la locura de unos pocos», rezaba el comunicado. Embargados por la emoción y la rabia del momento, los asistentes a la Plaza delPan rompieron en varias ocasiones el discurso del alcalde con aplausos y gritos de 'Viva España'.

Silencio en señal de duelo. El respetuoso silencio que protagonizó la convocatoria nacional de manifestación de la tarde, se dejó notar también por la mañana, en las citas organizadas para mostrar repulsa por el atentado y respeto por las cerca de 200 víctimas. Así, además de la plaza Padre Juan de Mariana, que reunió a un centenar de personas, el Hospital Nuestra Señora delPrado y el ICS reunieron a cerca de 300 personas que, de forma pacífica y durante 15 minutos, demostraron su ira por la violencia terrorista. Allí, batas blancas y verdes de los centros sanitarios se mezclaban con los monos azules de los trabajadores de obras de la zona.

La Universidad de Castilla-La Mancha y algunos institutos de la ciudad se sumaron a la protesta, en silencio, roto por un cálido aplauso de recuerdo y solidaridad, a las puertas de los centros.  

El 12 de Marzo también se celebró en la Basílica del Prado un tributo religioso por los fallecidos en la masacre. Bajo el cobijo de la Virgen del Prado, el vicario episcopal y rector, Felipe García Díaz-Guerra, acompañado por una treintena de sacerdotes, concelebraron el oficio religioso que llenó el templo en memoria de las vícimtas del terror.