Un homenaje a Nuestra Señora de la Natividad. Así podría resumirse la bandera del municipio de Méntrida, que ha sido recientemente aprobada, como ha publicado el Diario Oficial de Castilla-La Mancha (DOCM). Si ya el escudo rinde tributo a la patrona, con dos cuarteles dedicados exclusivamente a la figura de la encina, donde se supone que se apareció la Virgen a un vecino allá por el año 1270, la bandera ‘remata’ ese homenaje a través del verde, que viene a simbolizar el color del prado donde Nuestra Señora de la Natividad hizo su aparición, como confirma el alcalde, José Sánchez.
El regidor mentridano explicó que hace ya bastantes años que la idea de contar con una bandera ha venido rondando a la corporación, aunque el primer modelo que se pasó a la Junta, y que desde allí viajó al Ministerio de Cultura, fue desaconsejado por éste. En esa propuesta se quería representar el origen del municipio, ligado al Condestable Álvaro de Luna, aunque resultaba un tanto complejo.
Tras un tiempo con el proyecto en stand by, la corporación actual recuperó la intención de la bandera hace unos tres años. «Había diferentes opiniones de cómo hacerla, pero al final lo que se decidió fue poner como base un paño verde que representa el prado donde se apareció la Virgen y encima el escudo de Méntrida con dos danzantes que lo sostienen».
A este respecto, Sánchez recordó que es tradición que, ahora los jóvenes, pero antiguamente vecinos de cualquier edad, los mentridano bailen la bandera durante los actos en honor a Nuestra Señora de la Natividad, especialmente durante la romería que se celebra a finales de abril para conmemorar su aparición en el Monte Berciana, que hace siglos era territorio de Segovia y que el municipio compró para poder rendir tributo a la Señora, de ahí ese verde.
El escudo que se encuadra en el centro de la enseña, de aproximadamente medio siglo, por su parte, también recoge esa tradición de la aparición, ya que en dos de los cuatro cuarteles aparecen sendos tocones de encina, árbol en el que la tradición cuenta que se apareció Nuestra Señora de la Natividad; los otros dos están ocupados por dos vacas cada uno, en honor a esos boyales donde pastaban los animales de los vecinos siglos atrás. Y en el centro, de nuevo un tocón de encina con el símbolo de la Virgen en su parte superior.
Precisamente por esa devoción a la Natividad, el alcalde espera que la nueva bandera, ya impresa sobre tela, pueda mostrarse al conjunto de los vecinos el próximo 25 de abril, con motivo de la romería. «Sería un buen momento», reconoció el regidor municipal.